La campeona de España a los 15 años que repite medalla... a los 80

La tarraconense de adopción Anita Krohnert, nadadora del CN Tarraco, logró el oro a los 15 años y ahora la plata en máster +80

02 agosto 2018 08:57 | Actualizado a 02 agosto 2018 09:12
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Cuando Anita Krohnert se tiró a la piscina de Sant Salvador, por hobby, casi como un entretenimiento para hacer salud, sus largos llamaron la atención de los socorristas. Esa mujer que acaba de cumplir los 80 años exhibía algo insólito: trazas insospechadas y maneras de campeona en el letargo, unos tiempos muy parecidos a los que registran los campeones de España en categoría veterana. «La natación es como cuando vas en bicicleta, nunca se olvida», recuerda ella, que hace ocho años, cuando se quedó viuda, buscó actividades para llenar el tiempo, básicamente aquagym y algo de natación, sin la mayor pretensión. Anita se dejó aconsejar y pronto estuvo siguiendo un plan de entrenamiento en el CN Tarraco. «Tuve que recuperar la técnica», explica ella.

El fruto de ese empeño veterano no tardó. Anita Krohnert se agenció la plata en los 50 libres del Campeonato de España máster celebrados en julio en el CN Reus Ploms. Lo hizo con una marca de 1:07, en la categoría +80. 

¿Pero quién es realmente Anita Krohnert, que ha conseguido a los 80 ese preciado metal? Su incursión en la natación es realmente un regreso, que está siendo por todo lo alto. No era la primera vez que Anita lograba un éxito en un Estatal de natación, aunque para ver su anterior hito había que remontarse a 1953, cuando ella tenía 15 años. En Montjuïc, la entonces jovencísima nadadora fue Campeona de España de 4x100 libres, un fabuloso resultado para impulsar lo que parecía una carrera lanzada.

Anita Krohnert tenía hechuras de promesa cuando competía en el Metropol, un club canario que la cobijó en aquel primer triunfo, único prácticamente hasta día de hoy. «Yo nací en Guinea Ecuatorial, pero a los cinco años mi padre me mandó a un internado a Canarias, para estudiar. Era algo habitual en mi país. Mi casa estaba pegada a la piscina y me aficioné», cuenta Anita, afincada en Tarragona desde 1982, aunque de espíritu nómada.

Ella vino al mundo en 1938, hija de una guineana y de un alemán. Su padre era Otto Krohnert, un afamado terrateniente con fincas de cacao y un reputado cazador de elefantes –versan crónicas y hasta libros sobre sus andanzas–, con solvencia económica para poder enviar a Anita y a sus hermanos a estudiar a Europa, en concreto, a Canarias, allí donde se forjó aquella fugaz afición a la natación. 

Pero a los 18 años tuvo que regresar a África, poniendo fin a su carrera. «Cuando volví no seguí compitiendo. En la finca que teníamos había piscina, pero no pude continuar», recuerda ella. Poco después, Anita se enamoraría de un tarraconense que emigró a Guinea Ecuatorial por trabajo. En la colonia española tuvo a los dos primeros de sus seis hijos. «Fui madre a los 23. Y luego tuve cinco más, ya no me pude dedicar más a la natación. Estuve siempre criando a mis hijos», explica. 

Anita, su marido y sus hijos aún emprendieron más camino después de abandonar definitivamente, a inicios de los años 70, una Guinea Ecuatorial que había dejado de ser colonia para alcanzar la plena independencia; primero Castellón, luego otra vez Canarias y, finalmente, en 1982, Tarragona, destino final: «Mi marido siempre quiso volver a su tierra. En Els Pallaresos, que era su pueblo, montó una serrería». 

Los hijos fueron creciendo, su marido murió y ella, con las raíces ya aquí, aprovecha ahora el guiño que le hace el destino en forma de reencuentro con el que había sido el deporte de adolescencia en el que brilló: «No me esperaba volver a nadar. Ahora quiero disfrutar de ello otra vez».

Comentarios
Multimedia Diari