La pesadilla en el Nou Estadi continua

El Nàstic y el Nou Estadi viven una relación complicada esta temporada. Una pesadilla que no llega a su fin y que está mermando seriamente la confianza tanto de los futbolistas como los aficionados. Esta jornada ante el Zaragoza, los granas volvieron a caer. Sin embargo, esta derrota tuvo todavía un punto más cruel ya que los de Nano Rivas tuvieron una puesta en escena imponente que mereció premio.

Natxo González trazó un partido que acabó ganando con dos golpes contundentes, usó las armas a las que se ha encomendado el Nàstic esta temporada para sumar victorias de prestigio en algunos de los escenarios más importantes de la categoría. Pagó con la misma cara de la moneda. Golpeó poco, pero cuando lo hizo fue terriblemente efectivo.

Esta efectividad provocó que el Nàstic sumara su cuarta jornada seguida sin ganar en el Nou Estadi y su octava derrota como local de la temporada. Los números hablan por si solos, el conjunto grana es el segundo peor conjunto de la categoría en casa solo superado por el actual colista, el Sevilla Atlético. Y es que los granas solo han sumado 11 puntos en el feudo tarraconense. De no ser por los 21 puntos que acumula como visitante, siendo el mejor conjunto de la categoría empatado con el Osasuna, la situación para los tarraconenses sería mucho más peligrosa de lo que ya es.

Huesca, Reus, Cádiz y Zaragoza

Tal es la mala racha en el feudo grana, que los hombres de Nano Rivas acumulan ya 360 minutos sin ir por delante en el marcador. La última vez fue ante el Sevilla Atlético, encuentro de la decimoctava jornada de liga en el que vencieron al filial hispalense por dos goles a uno.

Tras esa victoria, el Nàstic cayó ante el Huesca por uno a dos, en un encuentro en el que siempre fue a remolque tras los goles del Chino Ávila y Manu Barreiro. Maikel Mesa solo pudo recortar distancias en el descuento. En la siguiente jornada, los granas caerían en el derbi frente al Reus en un partido que igualaron, pero que acabaron perdiendo en el tramo final con aquel doloroso gol de Vítor Silva.

En la pasada jornada como local, Nano Rivas regresó al banquillo del Nou Estadi con un empate a cero que supo a victoria ya que el rival era nada más y nada menos que el Cádiz, por aquel entonces segundo clasificado de la categoría. Con la derrota de esta jornada ante el Zaragoza, son ya cuatro los partidos en los que la hinchada del Nou Estadi no experimenta la sensación de ir por delante en el marcador. Puede resultar algo anecdótico, pero la realidad es que esta sería una tesitura que agradecerían los jugadores para jugar con mayor confianza.

Ante el Tenerife, la idea tiene que ser clara: los granas deben buscar el gol con una puesta en escena similar a la que tuvieron ante el Zaragoza. El premio llegará y con un Nàstic por delante en el marcador, las cosas pueden ser muy diferentes. Sin embargo, antes hay que vencer a un rival directo por la permanencia como es el Barça. Por suerte, lejos del Nou Estadi todo es distinto.