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Constantí será una de las sedes que albergarán pruebas deportivas durante la celebración de los Juegos Mediterráneos Tarragona 2017. Concretamente, el Pavelló Poliesportiu municipal será el punto neurálgico de la competición de halterofilia. Pese a ser una disciplina poco practicada en la demarcación, casi desconocida, sin ningún club federado, la comisión técnica ha definido los requerimientos necesarios para adecuar el espacio a uno de los deportes más históricos.
Con un origen en tiempos Antes de Cristo, esta modalidad explotó en el siglo XIX por medio de concursos de fuerza en tabernas, donde se levantaban barras de hierro con bolas de metal en los extremos. De allí pasaron a exhibiciones en circos, a torneos entre clubes y finalmente a los Juegos Olímpicos. Las primeras olimpiadas modernas, en Atenas 1896, introdujeron la halterofilia como disciplina competitiva. Desde entonces, cuando Launceston Elliot fue el campeón a una mano con 71 kilos, pasando por la hegemonía de la URSS en los ochenta y el debut de la categoría femenina en Sidney’00, se llega a los grandes resultados cosechados en los Juegos Mediterráneos Mersin 2013 por la delegación española.
En el apartado masculino, Michael Otero se colgó el bronce en la arrancada de menos de 56 kg, al levantar 107 kilos. En el femenino, Estefanía JuanTello, en 48 kg, logró la plata en dos tiempos con un peso de 94 kilos; en 69 kg, Sheila Ramos sumó dos bronces, 95 kilos en arrancada y 121 en dos tiempos. Pero la estrella estatal fue Lidia Valentín con dos oros, en 75 kg, con 120 y 145 kilos.
Para acoger a los mejores deportistas de España, y parte del continente, sin duda el espacio de Constantí deberá estar preparado para ello.
Las obras de adecuación de las instalaciones deportivas, que tendrán una inversión de 96.731 euros, por parte de la Diputació de Tarragona, y otra parte confinanciada por del Ayuntamiento. Entre las mejoras previstas está la renovación de los vestuarios y de las zonas de baño, con área de sauna, ya que es un elemento vital para regular el peso de los levantadores. Además, habrá zona de gimnasio, nueva refrigeración del sistema de ventilación y la adecuación de la pista para albergar el pesado material de halterofilia.En el exterior, también se mejorarán los accesos al pabellón.
Estos cambios se harán con el objetivo de estar a la altura de la cita internacional y para que su legado quede en forma de un espacio que suponga un punto de partida de cara desarrollar la halterofilia en nuestro territorio.
