Los jefes preparan las fichas

Natxo González llegó puntual a su cita con Juan Merino. El Nou Estadi cobijó a ambos entrenadores bajo una lluvia chispeante y las preguntas de cerca de quince periodistas. La escena bien lo merece. Por primera vez en Segunda División, Nàstic y Reus se medirán en el campo grana.

Los micros apuntaron a Merino en la primera pregunta: «Es un partido importante, como una final a la que se llega con mucha igualdad y se decidirá por detalles. Estamos supermotivados con mucha intensidad pero con los pies en el suelo sabiendo de la dificultad del Reus, que lo ha demostrado toda la temporada».

Acto seguido Merino le cedió el testigo a Natxo, que centró la atención de los medios: «Desde nuestra posición lo vivimos con tranquilidad, otra cosa es todo lo que rodea al partido. Pero de puertas para adentro es una semana más, trabajando de igual manera para poder conseguir los puntos». «Nunca sabes lo que puede pasar en un partido. Es verdad que ahí están los números y el Nàstic en esta segunda vuelta tiene unos registros de privilegio, nosotros no. Pero en la primera vuelta veníamos de alguna derrota, el Nàstic de dos victorias. Por un lado están los resultados y por el otro, el juego del equipo y en esto estamos tranquilos», añadió el vitoriano.

‘Máxima igualdad’

El entrenador del Nàstic volvió a coger el turno de palabra: «El partido va a ser muy disputado y competido, de máxima igualdad. El Reus ha demostrado toda la temporada ser sólido y lleva los mismos goles encajados que el Levante. No es fácil estar en la situación del Reus, hay cosas que las hace muy bien aunque ahora viene en una racha un poco negativa de resultados, pero ha sido en partidos muy ajustados donde ha estado más cerca de ganar que de perder».

Sobre la importancia del choque, Merino consideró que «es un partido que tiene que ser vibrante para la afición. Ojalá los tres puntos se queden aquí, pero para mi y mis jugadores es más que una final por lo que representa como derbi y lo que hay en juego, con los dos equipos cerca del descenso. Somos un equipo que estamos acostumbrados esta temporada ha estar abajo pero que a base de mucho sufrimiento y trabajo vamos saliendo».

Acerca del choque que espera, Natxo se mostró cauto:«Nunca se sabe. Suelen ser partidos igualados y disputados con diferencias mínimas en cuanto al resultado pero nunca sabes que va a pasar. Una jugada al inicio puede marcar el desenlace».

«En teoría es difícil que pueda haber muchos goles –argumentó el míster rojinegro–, pero en el fútbol, en la primera jugada puede haber una circunstancia que haga que no sea así. Lo que va a ser es un partido atractivo, muy interesante y vibrante y cada uno con sus armas va a tratar de llevárselo».

Merino, especialista en derbis de alto voltaje con el Sevilla en su pasado como jugador y entrenador del Betis, analizó que «independientemente de la clasificación es un partido importante. Las dinámicas hace que un jugador llegue mejor en un momento dado, pero normalmente en los derbis se vive mucha igualdad. Además, la clasificación demuestra que los dos equipos tenemos mucha igualdad, sólo nos llevan un punto».

Respecto a cuál podría ser la clave dijo que «lo importante es hacer ver a los jugadores que son más que tres puntos. Vengo de vivir otros derbis que por categoría son diferentes, pero no por grandeza. Desde que estoy aquí, la gente por la calle está deseando que su equipo gane. Hay que dar el máximo en todos los aspectos».

«El empate es un mal resultado». Ambos entrenadores firmaron la afirmación, y Merino añadió: «Por la filosofía de uno y otro, siempre se sale a ganar, además jugamos en casa. Aunque hoy en día un punto es importante para los equipos que estamos abajo, siempre la idea y la mentalidad es de ganar».

Finalmente, Natxo respondió sobre la mala racha anotadora de su equipo:«Estas últimas semanas perseguimos romperla. Mantener nuestros puntos fuertes a nivel defensivo, que lo estamos haciendo bien, y buscar la portería contraria, que la estamos encontrando pero no la estamos enchufando. Llegamos y generamos, aunque no es fácil a estas alturas de la temporada porque la gente tiene respeto a romper la rigurosidad defensiva. Pero eso es lo que nos da seguridad».