Motivos para confiar en la salvación del Nàstic

Ningún seguidor del Nàstic esperaba otro final agónico. Con la temporada pasada habían tenido suficiente. Confiaban que la lección estaba aprendida y que, si bien, tampoco iban a vivir un curso como el mágico 2015-16, verían el final del campeonato cómodamente. Bendita inocencia.

El panorama grana se ha ido enturbiando jornada a jornada. Las ocasiones para sentenciar la salvación han ido pasando sin que el equipo demostrara capacidad para aprovecharla. 

Pero el pasado pasado está. Solo queda mirar hacia adelante. Hacia la Torre de la Giralda que adorna la ciudad de Sevilla, escenario del próximo partido del Gimnàstic el domingo a las 18.00.

Los pesimistas tendrán motivos suficientes para la desesperanza. Tirar la toalla es lo más sencillo. Como apuntaba ayer Álvaro Vázquez en su cuenta de Twitter (@AlvaroVazquez91) «Si te rindes cuando las cosas empiezan a ponerse difíciles, nunca lograrás nada que valga la pena». Es turno para el optimismo. De encontrar razones para confiar en una resolución positiva del desenlace. Aquí van unos cuantos.

1. Colchón de puntos

El Nàstic tiene un margen de cuatro puntos respecto al Córdoba, equipo que marca la zona de descenso. Eso son dos partidos. Es decir, la mitad de las jornadas que restan. Una distancia cómoda, pero no definitiva. Además, el ‘goal average’ con el equipo blanquiverde es de los pocos que tiene a favor el cuadro tarraconense. En caso de empate, serían los cordobeses quienes descenderían. 

Si se mantiene la diferencia, el Gimnàstic podría encarar la última jornada de competición con la tranquilidad de tener su continuidad en la élite asegurada una temporada más.

2. Depende de sí mismo

Si los granas quieren mantenerse lo único que tienen que hacer es ganar ocho puntos más que el Córdoba en los últimos cuatro partidos. Así de sencillo. No debe esperar el favor de nadie. Ni mirar el resto de partidos para determinar sus opciones. Si gana el partido que tiene delante, los resultados de la jornada le darán igual. Seguirá por delante de la zona de descenso.

Tener el poder de determinar el futuro de los demás y el de uno mismo es más seguro que esperar la colaboración de un buen samaritano. El Nàstic ya ha hecho bastantes favores, perdiendo en Lorca y ante Osasuna, manteniendo la esperanza de los equipos del descenso. No puede permitirse seguir contribuyendo a la felicidad de otros.

Nano Rivas debe convencer a sus jugadores de ganar al Sevilla Atlético el domingo. Es lo único que cuenta.

3. Mismos puntos que el 2017

En la jornada 38 de liga de la temporada 2016/17 el Nàstic tenía 43 puntos... los mismos que este curso. Sin embargo, la situación es completamente distinta. El curso pasado el equipo estaba 19º, en zona de descenso, con los mismos puntos que el Alcorcón, que marcaba la permanencia. Por detrás, Elche se situaba a una sola unidad de los granas y Mallorca y Mirandés cerraban la tabla con 39 y 36 puntos respectivamente. Aún con opciones. Este curso, tanto Sevilla Atlético como Lorca están descendidos y el Barça B puede estarlo este fin de semana. 

4. Calendario rivales

El principal rival de los granas en este tramo final, el Córdoba le aguarda un calendario realmente complicado. Esta misma jornada visitan al líder de la categoría, el Rayo Vallecano, que quiere certificar su regreso a Primera lo antes posible. Después recibe al Almería, en un derbi andaluz con muchos números de ser decisivo para ambos equipos. El partido más accesible es el que tendrán en el Estadi de Reus.

Los rojinegros no se juegan nada, pero en su estadio se han mostrado solventes y sólo han cedido dos derrotas. Cerrarán el curso con otro candidato al ascenso directo, el Sporting. El Nàstic tiene un rush final con Huesca y Rayo, pero para entonces se espera haber celebrado ya la salvación.