Rubén Gómez: 'Soy feliz en el atlético'

Rubén Gómez Domínguez (La Canonja, 1995) ha pasado de ser preparador físico de La Floresta a serlo de las categorías inferiores del Atlético de Madrid en apenas seis meses. La oportunidad le llegó en enero cuando el conjunto colchonero aceptó su solicitud para realizar las prácticas de la carrera de INEF (Ciencias de la Actividad Física y del Deporte) hasta el final de la presente temporada. De momento, disfruta de una experiencia única y no mira más allá, aunque es obvio que el deseo de continuar en un club gigante siempre se tiene en mente. 

¿Cómo se pasa de La Floresta al Atlético de Madrid?
He estado muchos años en La Canonja como entrenador y llegué a ser coordinador y luego estuve año y medio en La Floresta de preparador físico donde primero estuve en el Juvenil A y esta temporada estuve medio año en el primer equipo. Este año tenía que hacer las practicas de INEF (Ciencias de la Actividad Física y del Deporte) y por mediación de un contacto pues tire el currículum y me llamaron para hacer las practicas. 

¿Y ese cambio de entrenador a preparador físico cómo se da?
No me había especializado nunca en la preparación física porque siempre me había dedicado a entrenar y la temporada pasada un amigo me comentó de ir con él pero de preparador físico al Juvenil preferente. Me pareció una buena oportunidad y desde la temporada pasada que me he especializado en ello. 

¿Entonces no siempre tuvo claro que quería ser preparador físico?
No, la verdad que no. Sí que es verdad que yo siempre he sido una persona con el sentido del deber grande y me ha gustado mucho el hecho superarse a uno mismo y el ayudar a los demás a inculcárselo era una cosa que sabía que me podía llegar a gustar.

¿Dudó en marcharse a Madrid cuando le comunican que cuentan con usted?
En ningún momento uno duda en fichar por un equipo tan grande como es el Atlético de Madrid. 

Los primeros días en Madrid supongo que fueron de nerviosismo, ¿no?
Yo soy de un pueblo como La Canonja, un lugar tranquilo en el que se conoce todo el mundo y coges el coche para ir a todos lados. El primer gran cambio en Madrid fue adaptarme al hecho de no tener coche, voy en metro y bus a todos lados y siempre están llenos de gente. Hay gente de mi alrededor que dice que le agobiaría mucho vivir en una gran ciudad, pero a mi me parece muy bonito y lo estoy disfrutando mucho.

¿Cuáles son sus funciones desde su llegada?
Las primeras semanas fueran de adaptación e intente interiorizar la forma de trabajo que tiene el club. Luego ya comencé a ayudar al preparador físico del Juvenil Preferente y al Cadete Preferente. Además, también estoy en el gimnasio de la sede de Orcasitas. 

¿Ha notado el nivel de exigencia de un club  como el Atlético?
Vestir este escudo la verdad es que es un honor y tienes que respetarlo y dar una buena imagen en todos los lados en los que vas. 

¿Ha notado ego en los jugadores? Ha pasado de preparar a futbolistas de Tercera Catalana a hacerlo a promesas de uno de los clubes más grandes del mundo. 
No lo he notado porque el vivir el día a día con ellos te hace ver que son gente muy sociable.

El Atlético es un club que tiene una hornada de jugadores importantes en la cantera. ¿Tan buena pinta tiene el Juvenil A?
Si los ves entrenar en el club hay una calidad tremenda, un ritmo tremendo de entrenamiento y pienso que el Atlético ha crecido mucho y va a seguir haciéndolo. 

El tarraconense Ricard Sánchez anda peleando en el filial. ¿Ha hablado con él?
No he coincidido ni he tenido la oportunidad de hablar con él, pero me han hablado muy bien de él y lleva toda la temporada teniendo muchos minutos con el filial. 

¿Le han comentado algo de la temporada que viene?
A día de hoy no sé nada. Lo único que quiero es seguir aprovechando la oportunidad, seguir disfrutando y si puede ser, obvio que me gustaría seguir allí muchos años. 

¿Tiene alguna meta soñada en el mundo de la preparación física?
A todo el mundo que estamos en este mundo creo que nos gustaría a Primera o Segunda División. Otra cosa que soñaría sería poder vestir la camiseta de la selección, aunque no fuese la de la absoluta (Ríe). 

Y si le digo ser preparador físico del primer equipo del Nàstic, ¿qué me dice?
Me encantaría. He sido socio toda la vida y lo he vivido siempre muy intensamente. Ahora mismo soy muy feliz en el Atlético y cada minuto aquí es un regalo y quiero seguir muchos años más.