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El fatídico final de año del Nàstic en el que ha cosechado un pobre bagaje de cuatro derrotas, dos empates y una victoria, o lo que es lo mismo, 5 puntos de 21 posibles, ha provocado que el equipo grana haya abandonado los puestos de play off y se haya consolidado en la zona media de la tabla. Este hecho traerá consecuencias inmediatas en el mercado de invierno que se abrirá el 1 de enero. El objetivo del conjunto tarraconense es regresar al fútbol profesional y no se ha ocultado en ningún momento de manera pública. Se debe conseguir o al menos pelear por el ascenso. Ahora mismo esta meta está algo lejana y desde la cúpula grana se cree que hay que tomar medidas para intentar volver a iniciar una buena racha que comience en el 2022.
La próxima ventana de fichajes va a tener altas y bajas. Probablemente sean más de las esperadas en un principio, pero lo cierto es que la mala trayectoria del equipo en las últimas semanas ha provocado que se crea que la plantilla necesita varios retoques. No habrá cambios en el banquillo porque se sigue confiando en la figura de Raül Agné. La victoria ante el Villarreal B le reforzó y la derrota frente al Costa Brava no le dejó sin crédito. Le ven un técnico comprometido con el proyecto, incansable en el trabajo y al que le están faltando mimbres en el plantel y algo de fortuna.
A nivel de altas, el Nàstic fichará como mínimo tres jugadores. Un delantero, un mediocentro y se estudia el mercado de sub 23 para añadir una pieza más al equipo de mediocampo para adelante. El favorito para la punta del ataque es Juan Camilo Becerra como ya adelantó el Diari. Un ariete que milita en la Ponferradina cedido por el Espanyol, pero que no está teniendo minutos y que podría tener en Tarragona un escenario ideal para su progreso. En el centro del campo ha sonado el nombre de Elías Pérez del Extremadura, pero hay más opciones que baraja la entidad grana para la medular.
En el apartado de salidas, el Nàstic va a tener que dar la baja como mínimo a dos fichas mayores, ya que no hay espacio para inscribir a los dos jugadores que van a llegar sí o sí este invierno. Pol Ballesteros es uno de los elegidos y se marchará cedido, mientras que en la segunda baja hay más dudas. Uno de los candidatos es un Pedro Martín que no ha tenido los minutos esperados y que cuenta con mucho cartel en Primera RFEF. Más allá de estas dos posibles salidas, el Nàstic también apostará por la salida de varios sub 23. Óscar Sanz y Karim L’Koucha tienen opciones de marcharse cedidos para disponer de los minutos que no han tenido en Tarragona.
En todo caso, a partir de hoy se van a comenzar a dar los primeros pasos para el mercado invernal que se acerca. Pueden haber todavía más sorpresas tanto en el capítulo de altas como de bajas, ya que la ventana de fichajes es larga y ahí entran en juego las oportunidades que se presenten y las intenciones de futuro inmediato de algunos jugadores de las plantilla.
Abróchense los cinturones porque viene un mercado de fichajes con movimientos. El Nàstic tiene la ambición de retocar una plantilla que por fin esté preparada para pelear por el ascenso.
