Sólo hoteles de Salou y La Pineda podrán albergar la villa de los Juegos Mediterráneos 2017

Las condiciones que exige el comité organizador limitan la elección del operador que gestionaráel servicio

19 mayo 2017 22:12 | Actualizado a 22 mayo 2017 14:45
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Sólo algunos hoteles de Salou y La Pineda podrán ejercer como villa mediterránea de los Juegos de Tarragona 2017 y gestionar el alojamiento de los 4.000 deportistas y técnicos que se darán cita durante el evento. Así se desprende analizando los numerosos requisitos que exige el comité organizador para la prestación de este servicio, que ha salido a concurso por un precio global de 5.305.785, 12 euros según las bases que se han hecho públicas a través de la sede electrónica del Ajuntament de Tarragona.

El presupuesto y la decisión de apostar por hoteles para ubicar la villa ya eran conocidos, una vez quedaron descartadas otras alternativas como la reforma de la Tabacalera debido a su elevado coste (unos 12 millones de euros). La novedad ahora es la fórmula y características para escoger los establecimientos, ya que la ley de las administraciones públicas impide elegirlos directamente como contemplaba inicialmente el comité organizador.

Tarragona 2017 había llegado a negociar con diferentes establecimientos ubicados entre la Avinguda dels Països Catalans, la Avinguda del Batlle Pere Molas y la Calle Terrer (Villa Romana, Regina, Salauris...).

Era ideales por su capacidad y número de habitaciones, la proximidad entre ellos y la posibilidad de cerrar el perímetro de su área por temas de seguridad que impone el Comité Internacional.

Esas mismas características y que los hoteles estén en un radio máximo de 30 kilómetros respecto al anillo mediterráneo de Campclar, epicentro de la competición, se mantienen ahora en la licitación junto con otros nuevos requisitos como las fechas en las que deben estar disponibles (del 25 de junio al 12 de julio) y servicios que deben poder prestar.

Entre las peticiones figuran que los hoteles tengan experiencia en la celebración de por ejemplo congresos y cuenten con numerosos espacios complementarios que necesita una villa: desde una policlínica de unos 350 metros cuadrados con consultorios, dos salas de fisioterapia, una para el control antidopaje y otra de primeros auxilios; a un gimnasio de 200 m.; pasando por un centro multiconfesional (competirán 24 países de distintas religiones); un centro general de información y servicio para los distintos comités Olímpicos Nacionales (500 m.); un área de trabajo para el comité organizador;una zona recreativa y de ocio (300 m.) e incluso un supermercado y una tienda para la venta de productos oficiales.

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