Un Granada que se encomienda al ‘Huracán Machís’

El conjunto nazarí cuenta con un arsenal ofensivo descomunal. Cuenta con el extremo venezolano en sus filas, probablemente el futbolista más desequilibrante de la categoría

14 marzo 2018 12:46 | Actualizado a 14 marzo 2018 12:53
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Hablar del Granada es hacerlo probablemente de uno de los conjuntos con más talento de la categoría. Por no decir el que más. El proyecto del equipo andaluz no contempla un curso sin ascenso. La plantilla que ha confeccionado está destinada a ello. Sin embargo, en la Segunda División no manda el talento. Tampoco los nombres. Estamos ante la categoría que premia con mayor firmeza a los equipos equilibrados y clarividentes de ideas.

Por ello, el equipo de José Luis Oltra no terminó de ser aquel ‘coco’ en el tramo inicial de temporada. Le costó coger la sintonía. No obstante, en los últimos meses, los nazarís ya son aquella escuadra tremendamente efectiva que aspiraban a ser.  Necesitan poco para generar. Se arropan en Machís para decidir partidos. Si se le escapan puntos es porque se trata de un conjunto muy ofensivo al que suele faltarle fortaleza en la retaguardia.

A nivel ofensivo, Oltra ha ido jugando con dos sistemas a lo largo del curso. Ha ido intercalando el 4-4-2 y el 4-2-3-1. Si juega Joselu, el equipo nazarí comparece con dos delanteros. Sin embargo, el 4-2-3-1 se está imponiendo en las últimas semanas. El gran damnificado es Joselu y en su lugar entra Sergio Peña, un futbolista que ocupa la mediapunta.

Ha ido intercalando el 4-4-2 y el 4-2-3-1 en los últimos partidos

Sea cual sea el esquema utilizado, lo evidente es que el Granada es un conjunto con un potencial ofensivo descomunal. Suele atacar por bandas. Donde suele jugar con dos extremos puros y dos laterales profundos. Además, cuenta con un delantero como Adrián Ramos que se maneja a la perfección en las profundidades del área.

A nivel defensivo, el equipo suele posicionarse en un marcado 4-4-2. Este es uno de los engranajes defensivos más utilizados en la categoría. Sobre todo para los equipos que juegan con un 4-2-3-1 en fase ofensiva, permitiendo al delantero y al mediapunta tener un menor desgaste defensivo.

El Granada suele ser un equipo que espera en mediocampo, por lo que no apuesta por una presión demasiado alta, como por ejemplo el Tenerife, último rival de los granas. La idea de Oltra es la de tener dos líneas de cuatro bien replegadas, generando una trinchera que conceda pocos espacios al rival. Sin embargo, suelen aparecer grietas en la retaguardia ya que el equipo suele partirse ante los extremos tan ofensivos que presenta. Éste es sin duda su punto más débil. Aunque hay que resaltar que es un equipo que ha mejorado mucho a nivel de equilibrio desde los primeros meses de competición.

Tres peligros de los de Oltra

A nivel de nombres propios, son tres los futbolistas que suelen marcar la diferencia en el conjunto nazarí. El primero de ellos es Kundé, un mediocentro cedido por el Atlético de Madrid que comanda la medular. Es un centrocampista que tiene la habilidad de generar y destruir. Un todoterreno. Uno de esos futbolistas predilectos para ocupar el doble pivote. En el Granada de Oltra se siente importante. Suele tener mucho protagonismo tanto en fase ofensiva como defensiva. Estamos ante el rey de la medular nazarí.

Darwin Machís es el gran peligro del Granada. Probablemente estamos ante futbolista más desequilibrante de la categoría. En la banda izquierda causa pavor con sus diagonales con balón. Tiene uno contra uno, velocidad y sobre todo gol. 11 acumula en lo que va de temporada. La mayoría de ellos siguen un mismo patrón: diagonal y disparo desde la frontal al palo largo del portero.

Darwin Machís es el gran peligro del Granada

Por último, Adrián Ramos es el tercer gran peligro. El delantero colombiano se ha ido colando en el once titular de forma paulatina. Ahora ya es indiscutible. Tanto, que ha sentado al máximo goleador de la categoría el curso pasado, Joselu. Cierto es que sus cifras goleadoras no son despampanantes (3 goles), pero es un futbolista con capacidad de brega y con buen juego aéreo.

En definitiva, el Nàstic se va a encontrar con un Granada que pese a que llega de caer ante el Lugo, ocupa la tercera posición y que como local no suele conceder oportunidades a los rivales. Frenar al huracán Machís será una de las claves. Los de Nano Rivas van a sufrir de lo lindo para sacar los tres puntos. Sin embargo, si algo ha demostrado el conjunto grana es que no hay escenario inexpugnable si andan ellos de por medio.

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