Un Llagostera experto en defender

El conjunto de Oriol Alsina solo ha recibido dos goles en lo que va de curso en liga y se trata de un equipo realmente sólido en fase defensiva

12 diciembre 2020 19:20 | Actualizado a 12 diciembre 2020 19:51
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Todos conocen las fortalezas y las debilidades del Llagostera. Si hay un equipo reconocible en el subgrupo es el gerundense que juega de memoria y que sobre todo no varía nunca su estilo. Oriol Alsina es un técnico consagrado en el bronce que hace jugar a sus pupilos siempre con una filosofía marcada y que a grandes rasgos siempre le ha terminado dando éxitos.

Este año el Llagostera está viviendo un bonito comienzo de temporada. La rueda gira desde el comienzo y la continuidad que le ha dado al bloque conformado la pasada campaña le está dando resultado. Comparecerá en el Nou Estadi después de ganarle la Copa RFEF a las Rozas y como quinto clasificado en el subgrupo A con 10 puntos en su casillero. En todo caso, la estadística que más llama la atención es que solo acumulan dos goles en contra en liga en los siete partidos disputados. De hecho, en los últimos cuatro partidos no ha recibido ni un solo gol, un dato que impacta y que sobre todo reafirma que Es decir, el Llagostera defiende muy bien y los números no engañan.

El sistema en el que se arropa el conjunto dirigido por Oriol Alsina es el clásico 4-4-2. Un sistema preponderante en la categoría, ya que permite que los equipos se ordenen fácilmente y sobre todo generar una estructura defensiva fiable. Es una realidad que la del Llagostera lo es. Manejan con naturalidad el repliegue en bloque bajo y no asumen excesivos riesgos con el balón. En otras palabras, apuestan por no encajar y a partir de ahí construyen los partidos.

La fase defensiva del Llagostera está a un gran nivel, tal y como confirman los números. Repliega bien y sobre todo es contundente en el área propia. Además, es un equipo que penaliza los fallos del rival. Así ataca, busca el error del contrario para hincarle el diente. No obstante, es evidente que al igual que su juego defensivo es excelente, su juego ofensivo no resulta temible, ya que es un equipo que ataca con pocos hombres, de manera discontinua y de ahí a que solo lleve cuatro goles a favor.

Sascha, arma ofensiva

El juego ofensivo de los de Alsina se baja en los balones verticales para doble lanza que tiene en ataque y en los centros laterales cuando consigue progresar con balón en campo contrario. Allí Sascha resulta una pieza clave, puesto que es uno de esos arietes que siempre sale vencedor en el cuerpo y en el juego aéreo y que la temporada pasada ya le hizo mucho daño al Nàstic en el Nou Estadi.

Más allá del delantero, el Llagostera también cuenta con otros jugadores que están completando un buen tramo inicial de temporada.

Especialmente está destacando el veterano Marcos, guardameta del equipo de Alsina que partido tras partido está coleccionando paradas y actuaciones de gran mérito.

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