Un anfitrión de lujo en el Carranza

El ‘Bisho’ Bezares es uno de esos futbolistas que dejan huella por los equipos que pasan. Un hombre de fútbol de los de toda la vida. Mueren por la camiseta que visten. Pasan de la gomina y las botas de colores. Juegan como antaño, con un sólo objetivo, ganar. Basta charlas unos minutos con él para saber porque todos los equipos por los que ha pasado lo tienen en tan gran estima. En Tarragona, de hecho, todavía se le recuerda con especial cariño. Sólo estuvo una temporada pero su recuerdo permanece.

Jugó en el Nàstic en el curso 2012-2013

Fue la temporada 2012-2013, aquella en la que el Nàstic volvía a la categoría de bronce después de consumar su descenso. No fue un año fácil. Hubo cambio de entrenador a mitad de temporada, Javi Salamero ocupó el banquillo grana en detrimento de Kiko Ramírez, quien había sido el elegido para devolver al Nàstic a la categoría de plata. Sin embargo, Bezares se ganó el respeto de afición, cuerpo técnico y compañeros. Lo daba todo por la camiseta. Esa gracia por naturaleza lograba arrancar sonrisas en las buenas y en las malas.

A día de hoy, Bezares sigue al Nàstic al igual que lo hace con todos los equipos por los que ha pasado. Sólo fue una temporada, pero el ‘Bisho’, Tarragona «tiene un bonito recuerdo» de la ciudad. Demuestra que lo sigue cuando comenta la mala suerte que tuvo el equipo grana en el derbi del pasado domingo. Cuando vi que marcaba el Reus en el 89’, no sabía que decir... lo tenía en la mano, pero en el fútbol todo puede pasar», explica el de Guadiaro. Precisamente, en el Reus hay dos futbolistas con los que coincidió en su estancia en el Nàstic, David Haro y Alberto Benito. Del segundo habla maravillas, «cuando fichó por el Sporting yo pensaba que iba a debutar con el primer equipo. Es un futbolista con unas condiciones espectaculares», asegura el ‘Bisho’.

Respecto a su Cádiz, al cual define como «el club de su vida», lo ve en una situación parecida a la de los granas la temporada pasada. Es un equipo con una gran solidez defensiva, todos los jugadores se complementan y hay un buen grupo. Tiene similitudes con el Nàstic del año pasado», explica. Cuando habla del Carranza, todo es distinto, lo hace con un cariño y una admiración especial. Él lo conoce de primera mano en sus cinco temporadas en las que pasó allí. «El campo es precioso. Cuando los brigadas amarilla animan, la afición de detrás de la portería, y todo el grupo lo acompaña pues es que no se escucha. Es el jugador número doce. Cuando el equipo lo necesita, la afición aprieta y eso se agradece», relata el Coloso de Guadiaro.

Al ‘Bisho’ le sorprenden las críticas a Juan Merino, al cual define como «un entrenador muy profesional» y del cual cuenta la anécdota de que se cambió con él la camiseta cuando el entrenador grana jugaba en el Recreativo. «Aquí en Cádiz se le tiene mucho respeto, es uno de los primeros jugadores en jugar en la élite», asegura Bezares. El fútbol es caprichoso. El gaditano sólo pedía que el encuentro entre Cádiz y Nàstic no tuviese trascendencia, pero las circunstancias hacen que sea todo lo contrario. Bezares ama a su Cádiz, pero es agradecido a Tarragona. Tiene memoria, de lo que muchas veces carece el fútbol. Un anfitrión de lujo.