Villarreal B (2) - Nàstic (2): Punto y seguido

Villarreal vio la versión del Nàstic más cercana al campeón que se ha visto en las últimas tres jornadas. No fue el equipo que se espera afronte el play-off, pues para ello todavía le falta incrementar la intensidad y la concentración. Pero si se aproximó al orgulloso conjunto que cantó el alirón a tres fechas del final. Con la marcha adecuada los granas se hubieran llevado el partido de sobras. Encajó dos goles evitables. De estar más enchufados no hubieran entrado. El primero llegó cuando todavía se estaban colocando en sus posiciones. Un saque de esquina directo que se coló por el primer palo, sin que nadie despejara. El segundo fue imparable, pero la falta que lo originó sobró. El gol de Azkorra, en el tiempo de descuento puso un resultado sensato.

Fue un ensayo en toda regla. Moreno pudo probar diferentes ejercicios a lo largo del partido. Para ello puso un once que tranquilamente podría salir el primer partido de play-off.

Uno de los problemas del cuadro de Vicente en estos últimos partidos de liga es su mala salida al terreno de juego. El Nàstic tenía una elevado porcentaje de goles marcados en los primeros minutos. Los granas salían enchufados. La desconexión de los últimos partidos se ha llevado por delante esos inicios fulgurantes. La faena ahora es entrar en los partidos con los cinco sentidos. No había pasado ni un minuto cuando un saque de esquina cerrado de Marc Mateu se coló por el primer palo del arco de Reina, que volvía bajo palos tras dos partidos de ausencia.

El Villarreal B se creció. Animado con el tanto jugó desenvuelto. El ulldeconense Aleix comandaba al minisubmarino como un veterano. Colándose entre las líneas granas con soltura. El capitán de la Selección española Sub-18 pinta muy bien. Un centrocampista talentoso, con capacidad de liderazgo y un potente disparo que lució en el minuto 6.

Al cuarto de hora, el Nàstic se puso serio. Añadió intensidad y juntó líneas para minimizar los espacios por los que se movían los jugadores locales. Apretó dientes y empató el duelo. Giner recogió un balón tocado por Rocha en la frontal del área y lo puso en la misma escuadra de la portería de Bañuz (23’).

Los de Vicente Moreno empezaron a asumir el control y a recuperar sensaciones. El Villarreal B reculó ante las acometidas granas. La presión de Azkorra dio frutos. Cazó un cuero en la frontal y la cedió a la llegada de Rayco. Al canario le faltó definición (28’) ante Bañuz.

Antes del descanso hubo una ocasión para cada equipo. La del Nàstic doble. Lago enfiló hacia la meta castellonense. Soltó un latigazo duro que Bañuz despejó como pudo. Azkorra no llegó al rechace y tampoco Giner. La última del primer acto fue para Leo Suárez. Recorte y disparo al lateral de la red.

La reanudación no trajo grandes cambios. La línea grana seguía ascendente. Ni siquiera el golazo de Pablo González, en un lanzamiento de falta magistral, frenó el viento que soplaba favorable al Gimnàstic. La tuvo Lago que volvió a plantarse ante Bañuz. La pelota se le quedó un poco atrás y cuando quiso disparar ya tenía a un defensa encima para bloquear el tiro (64’).

El excelente meta del Villarreal B Bañuz apareció para impedir el empate poniendo la manoa un chute a bocajarro de Marc Martínez. El colegiado pudo señalar penalti en un agarrón de Tano sobre Azkorra.

El Villarreal B ralentizó el partido, aún más del que ya venía de serie. Los granas seguían intentándolo, resistiéndose a cerrar la liga con una nueva derrota. Azkorra cazó un pase profundo de Mossa, superó al portero y empató el duelo. Un gol importante para el delantero vasco que recupera el olfato de gol en el momento preciso.

Los trámites ya se han cumplido. Llega el momento que todos esperabámos. El del todo o nada. Ya no hay ensayos que valgan. La hora de la verdad ya ha llegado. El lunes se conocerá el rival.