Xavi Bartolo: 'El Play Off es una obligación para el Nàstic'

Xavi Bartolo (Bellver, 1968) se enfrenta a su segundo gran reto como técnico y en otro lugar reconocible para él. La presión que supone el intentar devolver al Nàstic al fútbol profesional no le asusta. Se muestra firme en sus convicciones y en su ideario.

Espera que, en esta segunda oportunidad, su trabajo sólo se valore por temas puramente deportivos.

Al final es lo que más puedo controlar. Lo que vivimos el año pasado en Reus fue una situación anómala en el fútbol profesional. Muy complicada, pero a nivel personal también me ayudó a enriquecerme.

Usted ha firmado por un club que en los últimos dos años ha devorado entrenadores. ¿No le asusta ese riesgo?

Conozco la casa y sé a dónde vengo. Conozco perfectamente a las personas que dirigen a la entidad, porque son las mismas que cuando estuve aquí en una anterior etapa. Tengo una relación muy directa con ellos, incluso de amistad, así que las cartas están encima de la mesa. No llego a un lugar nuevo, no hemos necesitado un período de adaptación entre los dirigentes y yo. Nos conocemos mucho, aunque ya soy consciente de que en el fútbol dependemos de los resultados.

Su nombre sonó en una anterior etapa como candidato al banquilo grana. ¿Pensó que algún día le llegaría esta oportunidad?

Nunca me lo he planteado así. Es verdad que hubo alguna opción, pero no se dio. He trabajado en otros sitios como preparador físico y segundo entrenador y lo que realmente he querido es precisamente eso, mantener mi vínculo con el fútbol. El año pasado se dio la circunstancia de que el Reus me ofreció el puesto de primero y lo tomé con mucha ilusión. Igual que ahora me tomo esta oportunidad que me da el Nàstic.

Me decía antes; «el objetivo es el play off».

No podemos engañar a la gente. En el siglo XXI, el Nàstic ha sido un club que se ha consolidado en la Segunda División y, después de esas dos últimas temporadas de tanto sufrimiento y el descenso, lo normal es que el club aspire a volver al fútbol profesional. Y para eso, primero hay que alcanzar el play off. Y somos conscientes de ello, no nos escondemos. El play off es una obligación, todo lo que no sea entrar en él, para mí, a nivel personal, se parecería a un fracaso. Luego, puedes ascender o no, porque en un play off se dan mil factores, pero hay que estar en él.

Y todo esto con un estilo y una filosofía de juego combinativo innegociable.

Nosotros creemos en eso. Supongo que cuando los dirigentes del Nàstic nos vinieron a buscar sabían cómo trabajamos. Apenas estábamos a 20 kilómetros de aquí, conocen el métido. No vamos cambiar nuestra filosofía.

¿Y cómo ha respondido el equipo?

Estamos en fase de crecimiento. Hemos disputado dos amistosos hasta ahora y se ha notado cierta evolución en el juego. Tenemos que mejorar porque esta plantilla practicaba otro tipo de fútbol y necesitamos un proceso, no se hace de hoy para mañana, pero hemos traído jugadores que se adaptan al juego que queremos implantar y los que se han quedado también nos pueden ayudar.

Uno de esos casos es Javi Márquez. Centrocampista del perfil que buscan y que parecía que saldría del club.

Nos ha costado convencerle porque venía de dos años complicados y es normal que los jugadores busquen nuevas experiencias. No voy a descubrir yo el currículum de Javi, en el juego nos puede dar mucho y a nivel de vestuario también. Nos hemos encontrado a un líder, un jugador muy implicado.

Y a Mou le ha traído de Japón!

Cuando vinimos tuvimos la posibilidad de incorporar a gente de nuestra confianza como Sergi o Ferran en la dirección deportiva o David Pajón como preparador físico. También podíamos elegir la figura del segundo técnico y tanto Abel (Mou) o Lluís Albesa estaban capacitados. Al final ha venido Mou que es un profesional top, como el resto que componen la estructura.

¿Cómo gestiona la presión?

Estoy tranquilo. Conozco el entorno del Nàstic y sé que si no hay resultados habrá críticas, pero nos ocurriría en cualquier otro club, más allá de los objetivos de cada uno. Es fútbol.