El 1x1 del Nàstic ante el Intercity

El portero sevillano fue superado en los tres goles. Lo cierto es que fueron tres acciones de difícil remedio. Dos manos a mano y un cabezazo inapelable.

El lateral rumano cuajó una actuación mejorada respecto a lo que se había visto hasta ahora, sobre todo en ataque.

Una de las tardes más incómodas para el central vasco que le tocó lidiar con un Etxaniz que le puso en apuros.

Vio la amarilla muy rápido y era evitable. A partir de ahí, también sufrió con Etxaniz. Eso sí, tuvo dos para marcar.

En ataque fue uno de sus mejores partidos llegando a línea de fondo. En defensa pecó a veces de blando.

Los equipos rivales ya le comienzan a ver como el faro ofensivo de los granas y debe irse acostumbrando.

Comenzó el partido robando y pasando con verticalidad, pero acabó precipitado y siendo sustituido.

Tuvo una jugada en boca de gol en la que no llegó limpio y luego no pudo meter esos centros precisos habituales.

Comenzó el partido recibiendo y generando entre líneas, pero se disipó y terminó sustituido al descanso.

Fue una tarde en la que no pudo apretar el gatillo y eso que tuvo varios remates para ello. Marcó dos goles en fuera de juego. Lejos de su mejor versión.

Sigue siendo el jugador que más ritmo competitivo tiene y se le nota. Está rápido, descarado y punzante. Debe seguir así.

El soriano marcó de penalti. Una zurda como la suya merece más minutos

El delantero asturiano generó varias ocasiones de gol, pero le volvió a faltar esa maldad en el área.

Buenos minutos del atacante que partió desde la derecha y se movió con libertad por la mediapunta.

Mejores minutos del mediocentro vasco al que se le vio con más ritmo competitivo.