Moreno: 'El tren vuelve a pasar'

El día decisivo se acerca. Ya se cuentan las horas. Hoy a las 12.00 h. quedarán 24 para que arranque la final en el Nou Estadi. Un duelo que puede devolver al Gimnàstic a la Segunda división. Difícilmente se puede encontrar un ‘nastiquero’ al que los nervios no le hayan devorado el estómago. El entrenador del equipo, Vicente Moreno, está igual que todos. Con ese cosquilleo incesante. «Son naturales. Quiere decir que nos estamos jugando algo importante. Es hasta bueno tenerlos si los trasladas de forma positiva y no te paralizan. A mí, ya cuando era jugador, me motivan, me empujan. En este sentido, me va la marcha».

Moreno ha visto la motivación en el rostro de sus jugadores: «Veo caras de ganas de que llegue el encuentro y encontrar lo que todos llevan buscando de manera insistente ya sea desde julio, el año pasado o incluso algunos de hace tres temporadas. Esta vez, no quieren que se les escape». Si a nivel mental no tiene dudas de que sus pupilos «están preparados», en lo que se refiere a la cuestión física está aún más seguro. «Llegamos en un momento de forma extraordinario. No sé cómo está el Huesca, pero como mucho estará igual. Mejor es difícil».

Por todo ello, el ‘míster’ grana es «optimista» y está convencido de que «están preparados para encarar la final. Si lo que veo en los entrenamientos se refleja en el campo, en el juego, haremos un buen partido y eso nos deja más cerca de ganar».

Últimas decisiones

El técnico tiene bastante claro el once que saltará al terreno de juego mañana a las 12.00 horas y solo le queda «alguna posición que decidiremos a última hora y alguna variante táctica». No descarta siquiera jugar con tres hombres atrás, «que cuando se lo hizo el Bilbao B les hizo daño». Planteamientos que rondan por su cabeza.

En cuanto al partido, el preparador valenciano recomendó que «estar tranquilos. Parece que el 0-0 les vaya bien a ellos, pero no sirve para ninguno de los dos equipos. Los dos tenemos que marcar. Es importante recordarlo para no tocar a zafarrancho de combate antes de tiempo».

Está claro que Moreno no quiere prisas. «Tenemos que hacer el partido de siempre en casa. Buscar la porteria contraria. No nos tiene que cambiar nada el hecho de querer mantener la porteria a cero o que nos marquen un gol. Al final lo que hay que hacer es ganar el partido», señaló.

El hecho de jugar en casa puede llevar a «que juegues algo más adelantado los primeros minutos», pero señaló «pero las circunstancias determinarán en qué zona se juega el partido». A priori, dijo Moreno «sí puede parecer que vaya a ser de largo recorrido, los dos conjuntos nos jugamos mucho y eso invita a pensar que la eliminatoria será competida y que cualquier detalle puede decantarla».

El entrenador del Nàstic dejó de lado la influencia que puede tener la derrota en Llagostera del año pasado y se limitó a destacar la «suerte de que el fútbol nos dé otra oportunidad para lograr el ascenso e incluso, aunque no lo pensemos, una más si perdemos». Por ello, Moreno insistió en que «somos afortundaos. A veces el tren no vuelve a pasar. Hemos trabajado mucho para que suceda y estamos listos».

A duras penas quedan 2.000 entradas para el partido. Para aquéllos que todavía estén indecisos, el entrenador granate les pidió un último empujón, «todos tenemos que poner de nuestra parte, porque es importante para nosotros deportivamente y económicamente y los jugadores lo agradecerán». Moreno resaltó el papel de la grada «en los momentos difíciles que seguro tendremos en algún momento de los 90 o 120 minutos».