Nàstic y Elche empatan en un partido de manicomio

Partido de pachanga entre Nàstic y Elche con muchas situaciones ridículas que acabó con la remontada del equipo tarraconense para sumar un punto

26 mayo 2019 20:14 | Actualizado a 26 mayo 2019 20:23
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Temas:

El Nàstic ofreció en una de sus últimas apariciones en Segunda División lo que se conoce en el mundo musical como ‘unplugged’. Un concierto íntimo (2.042 espectadores en el Nou Estadi) y desenchufado que se acabó convirtiendo en una pachanga entre colegas. Un cachondeo de principio a fin. Hubo tantas escenas cómicas. Las fórmulas de Enrique Martín, el error de Bernabé, los pitidos y cánticos de la afición contra Uche y Josema, la expulsión de Dani Calvo, el penalti de Salva, el golazo de Neider en propia puerta, el debut de Sun, la remontada grana, la expulsión de Pol Valentín, etc. Quedó un cómic de lo más original. Ojo que al gran Ibañez no le dé por plasmarlo en color.

El partido comenzó por los mismos derroteros que los últimos meses. El Nàstic es un equipo sin plan de juego, rudimentario, en el mejor de los casos, con unos jugadores incapaces de reemplazar esa falta de mapa. 

En uno más de sus locos inventos de Profesor Bacterio, el científico esquizofrénico que formulaba extraños artificios y brebajes para desgracia de Mortadelo y Filemón, Enrique Martín retó al público con una alineación provocadora. Salió en el penúltimo encuentro de la temporada en el Nou Estadi con Josema e Uche. Dos jugadores señalados, por distintos motivos, que generaron rechazo por buena parte de la grada desde que su nombre sonó por megafonía. 

El técnico ni siquiera agotó sus opciones de jugadores del filial en el campo. Puede poner a cuatro, pero jugó con tres (Pol Prats, Viti y Salva) para limitar el riesgo de que una expulsión le dejara con alineación indebida. Evidentemente, los portadores del futuro grana fueron lo mejorcito del partido. La anticipación de Salva, el criterio de Viti, las incursiones de Pol Valentín y la velocidad de Pol Prats son las bases sobre las que el próximo Nàstic quiere sustentarse. 


De las botas del carrilero gerundense nació la primera gran ocasión. Se deshizo de Ivan y Juan Cruz para colgar un centro que Uche logró rematar forzado. El cabezazo iba sin peligro, pero Pol Prats, bien colocado, consiguió tocar para variar la trayectoria del esférico, aunque no lo suficiente para sorprender a Edgar Badia. 

Sin apenas tensión competitiva, el partido tenía más pinta de amistoso veraniego que de encuentro de Segunda División. Había una ausencia total del choque. Ningún jugador, a excepción de los jóvenes, se arriesgaban el físico. Las marcas eran de reojo y abundaban los espacios. Todos los futbolistas podían pensar suficiente la acción antes de ejecutarla. Y en eso el Elche, con jugadores con el talento táctico de Xavi Torres, tenía las de ganar.

Aún así el Nàstic pudo adelantarse en el marcador con un disparo de Uche. Un tiro seco que el arquero barcelonés del Elche detuvo entre las piernas.

Curiosamente, fue por debajo de las piernas, por donde entró el gol ilicitano a la media hora de juego. Un disparo sin mucha convicción de Xavi Torres desde el balcón del área se coló por entre los brazos de Bernabé. Un error por el que el arquero sevillano recibió inmediatamente la redención del público. La grada reaccionó con aplausos hacia el portero que levantaba las manos en señal de perdón cuando se dirigió al vestuario en el descanso.
 
El ‘unplugged’ del Nàstic siguió liderado por Pol Prats y Pol Valentín. Los más activos y combativos del encuentro. El de Paüls encontró los huecos entre la zaga y a su espalda para llegar a zona de remate. Pero le faltó contundencia en sus golpeos. Tiene tiempo y ganas de aprender.

El 0-2 del Elche llegó nada más comenzar el segundo acto. El colegiado se cobró penalti en una disputa entre Viti y Javi Flores que acabó con el jugador del cuadro ilicitano en el suelo. Castro transformó la pena máxima.

Se quedó en superioridad numérica el Nàstic a falta de media hora para acabar el choque por expulsión de Juan Cruz. Otra oportunidad para que la libreta de Enrique Martín volviera a hacer una de las suyas. Cambió al 4-4-2 sacrificando a Viti y Josema. El resultado fue el 0-3. Iván Sánchez filtra a Josan que pica por encima de Bernabé.  

Quedaban poco más de 20 minutos, pero aún pasaron muchas cosas. El debut económico de Sun (dejando a Montero sin su merecido premio una semana más), la remontada con un gol de Uche, otro Neider en propia puerta y el 3-3 de Luis Suárez y la expulsión de Valentín por doble amarilla. Un final animado en la última canción tras un concierto aburrido.

Comentarios
Multimedia Diari