Los Dragons machacan a los Surge

Gran inicio de los Barcelona Dragons en esta segunda temporada de la franquicia reusense en la European League of Football. La franquicia de Reus destrozó a los Suttgart Surge, el mismo equipo que el año pasado les dejó sin la victoria en el estreno en el Estadi Municipal. Ayer domingo se cobraron la venganza. Les machacaron sin piedad en un partido soberbio (38-9).

Los nuevos ‘dragones’ comandados por el técnico Andrew Weidinger evidenciaron una mejora en sus prestaciones. Sobre todo en defensa. El nivel de todos los jugadores de la línea fue exquisito. Consiguieron 10 puntos de manera directa: una intercepción convertida en touchdown y dos safetys.

La defensa recuperaba y el ataque remataba. Zach Edwards, mucho más protegido que el curso pasado por la línea ofensiva, pudo conectar con el nuevo receptor Kyle Sweet. Una relación que apunta a superar incluso la que tuvo el año pasado con Jean Constant.

El primer cuarto sirvió de retorno a la competición. Los que estaban el año pasado para volver a reencontrarse con las sensaciones del partido. Los nuevos para ir percibiendo cómo es el torneo profesional continental. La primera posesión de Dragons dejó la primera conexión Minnesota – Rancho Santa Margarita entre el quarterback Zach Edwards y el receptor Kyle Sweet. Ambos dieron muestras de un entendimiento inmediato. Una conexión espectacular que irá a más a lo largo de la temporada.

Las primeras posesiones también sirvieron para ver cómo la línea ofensiva ha mejorado sus prestaciones. Zach Edwards está más protegido que la pasada temporada en la que prácticamente en cada acción era golpeado. Siguió mostrando su capacidad de escapar de las acometidas rivales pero también gozó de tiempo para tirar de brazo. La primera posesión Dragon acabó en un despeje para alejar al rival de su zona de anotación.

Los Surge tampoco pudieron acercarse ni a la ‘red zone’, las últimas 20 yardas del campo rival. La defensa verde erigió un muro que complicaron tanto el juego terrestre como el aéreo alemán. La única vez que la línea defensa reusense permitió lanzar en profundo al mariscal de campo local, Schroeder apareció Shan Wilson, de la segunda línea para impedir una recepción peligrosa.

La segunda posesión de los Barcelona Dragons explotaron todas las virtudes ofensivas que el ‘head coach’ Andrew Weidinger quiere dotar a su línea de ataque. Zach jugó con los receptores Sweet y Mario Flores, el ‘thigt end’ Igor Maslanka y el corredor Toni Montón. Incluso Edwards hizo de las suyas para correr sus primeras yardas de la temporada. Falló lo mismo que en el ‘kick off’ de la pasada temporada, las penalizaciones. Entre las faltas por agotar el tiempo para iniciar la jugada, las salidas falsas y una falta personal sobre el quarterback de Stuttgart con un tercer down largo, permitieron a los alemanes recuperar posesión y acercarse a medio campo.

No pasaron de ahí. La defensa de los Barcelona Dragons se mostró intratable. Michael Sam debutó con un bloqueo espectacular que tapó la carrera del corredor teutón. La presión defensiva amargó al ataque Surge que empezó a fallar estrepitosamente. Primero Yago Rivero aprovechó un mal snap (pase que inicia la jugada) para recuperar la pelota a favor de los reusenses en campo rival. Pudieron llegar los primeros puntos pero Giorgio Tavecchio no pudo golpear bien el ‘field goal’. Era cuestión de tiempo que llegara porque la superioridad verde sobre el emparrillado era evidente. Y llegó después de una ‘big play’ (gran jugada). Una jugada trenzada en Zach Edwards y Kyle Sweet. El pasador lanzó a más de 40 yardas y el receptor atrapó como si nada. El juego quedó perfecto para una carrera corta de Edwards que sumara los primeros 6 puntos de tochdown. Esta vez sí que pudo lograr el punto extra Tavecchio (7-0).

Era un aviso de lo que iba a venir en el resto de segundo cuarto. La defensa presionaba al ataque alemán cada más desquiciado. Los Stuttgart iban de error en error y los Dragons no perdonaban. El receptor Benjamin Plu conseguía el segundo touchdown consiguiendo atrapar en el límite de la zona de anotación.

La defensa entrenada por el mexicano Gabriel Sánchez seguía azotando al ataque alemán. Si la ofensiva reusense había anotado 14 puntos, los 8 restantes que lograron en el segundo cuarto los hicieron la defensa. Dos de ellos con un safety, lograron placar a un jugador rival en su misma zona de anotación, y otros seis con una intercepción que Alejandro Fernández convirtió en touchdown.

Aún llegaría otro touchdown antes del descanso, producto del vínculo incipiente Edwards-Sweet.

El segundo tiempo siguió con el mismo guion. La defensa de los Barcelona Dragons no permitían ni un centímetro, mientras que Edwards y Sweet seguían fomentado su conexión. Era tal la confianza en la defensa que la ofensiva se permitía jugarse un cuarto down en medio campo.

El primer error Dragon llegó con un fallo de Cereceda para alejar el balón. Se le cayó y se vio atrapado por varios defensores locales. Un safety que servía para que Surge lograra sus primeros puntos (29-2). Los de Stuttgart querían animarse con esa anotación pero cualquier atisbo de recuperación quedó enterrada con una intercepción de Jordi Brugnani. Un golpe que Kyle Sweet convirtió en letal con un dos recepciones, la segunda para el touchdown (36-2). El partido estaba sentenciado y pese al touchdown local, los reusenses sumaban su primera victoria del curso.