«Sin gol, no hay fútbol», suelen decir por ahí. En parte llevan razón. Es la esencia. Lo que te da la gloria. Lo que marca la diferencia. Al Reus se le ha resistido demasiado últimamente. «Nos falta un poco de brillantez arriba», comentó Natxo González, tras el último partido en casa ante el Lleida. El marcador final, 0-0.
Los rojinegros no han marcado en los tres últimos compromisos del año (Mestalla, Alcoyano y Lleida) y eso les ha impedido alcanzar éxitos. Sumar de tres en tres. De hecho, han cerrado 2014 inmersos en una pequeña mala dinámica. Cuatro jornadas sin ganar. Dos empates y dos derrotas. Fuera del play off. No es para encender luces preocupantes. Alarmas rojas. Ni siquiera preocupa demasiado al técnico. «Estoy seguro que si seguimos trabajando igual cumpliremos los objetivos».
En realidad, los puestos de privilegio no andan muy lejos. Sólo a un paso. Mantener la tranquilidad se convierte ahora en fundamental. Lo saben Natxo y sus chicos. Separados sólo por dos puntos del play off. El gran sueño de muchos. Sólo los elegidos acudirán a él. Xisco Hernández y Edgar Hernández, con cuatro goles cada uno, se han situado en primera fila de artilleros del equipo. El resto andan muy repartidos. Con dos se encuentran Marc Sellarès, Jaume Delgado, Álex Colorado, Sergi Masqué y Fran Carbia.
Mejoría defensiva
En cambio, con el paso del tiempo, el Reus se ha ido consolidando en el aspecto defensivo. Se mantiene entre los cuatro equipos que menos goles reciben del grupo III de Segunda B. Le han marcado 15.
Con todo, la plantilla ultima sus vacaciones navideñas, ya que está citada para este próximo lunes por la mañana para reiniciar los entrenamientos. Tanto el lunes como el martes, los jugadores se ejercitarán en doble sesión de trabajo. En Olot, el 4 de enero, espera el próximo reto.