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Seis personas han sido detenidas por la Guardia Civil en Vinaròs (Castellón), San Juan del Moro (Plana Alta, Castellón) y Sant Carles de la Ràpita (Montsià) en una investigación sobre abusos sexuales a menores.
Están acusados de delitos de abusos sexuales y corrupción de menores, tenencia de pornografía infantil y tenencia ilícita de armas, corrupción de menores y contacto con fines sexuales. Cuatro de los detenidos han ingresado en prisión.
La investigación se inició en Vinaròs a raíz de la denuncia de una madre que sospechaba que su hijo de 12 años habría intercambiado archivos con contenido sexual con personas adultas. A través de los correos electrónicos del niño, la policía estatal advirtió que el menor había sido víctima de abusos sexuales y de otros delitos contra su intimidad sexual por parte de los detenidos.
En los registros realizados en varios domicilios de las tres poblaciones, la Guardia Civil ha decomisado más de 20 gigas de material pornográfico infantil y siete armas, entre otros.
La Benemérita ha detenido a seis personas, cuatro de los cuales ya han ingresado en prisión tras pasar a disposición judicial, en el marco de la operación contra el abuso sexual de menores llamada 'Bambino' y que ha requerido más de un año de investigaciones. Todos los detenidos son de nacionalidad española y vecinos de Vinaròs, San Juan del Moro y Sant Carles de la Rápita.
En abril de 2017, la madre de un niño de 12 años denunció en la comandancia de Vinaròs que su hijo habría sido intercambiando archivos con contenido sexual con personas mayores de edad. La policía comprobó los correos electrónicos y comprobó que el menor había sido captado y había sido víctima de abusos sexuales por parte de los ahora detenidos.
Con la operación 'Bambino', la Guardia Civil pudo identificado las identidades ficticias con las que operaban los presuntos pedófilos y las cuentas de correo electrónico que usaban. A través de los mails, donde se hacían pasar en algún caso por menores de edad, convencían el niño para acceder a los encuentros sexuales o para que facilitara material con contenido sexual.
En los registros en Castellón y La Rápita se interceptaron cinco ordenadores portátiles, once discos duros externos, un ordenador de mesa, seis teléfonos móviles de alta gama, treinta memorias de almacenamiento y 50 cds. En total, el material tecnológico contenía más de 20 gigas de pornografía infantil.
En Vinaròs, la Guardia Civil también encontró una pistola cargada con munición y preparada para disparar, así como seis armas cortas detonadoras.
El juzgado de instrucción número 2 de Vinaròs se ha hecho cargo de se diligencias.
