La realidad a pinceladas de Francesc Moreso

Francesc Moreso sale a pintar a la calle cargado de bártulos: lleva lienzos, un caballete, una caja con pinturas, un cesto con tubos de colores y una silla para aposentarse ante su inspiración.

Su arte bebe directamente de la naturaleza y de escenas cotidianas con las que, a veces, se topa de manera casual. Por si acaso, siempre va con una cámara de fotos réflex para capturar cualquier imagen susceptible de convertirse en protagonista de sus cuadros. En su estudio, en el barrio tarraconense de Torreforta, guarda un amplio archivo de instantáneas. 

El pintor de Rasquera inauguró ayer una exposición en el Pati del Palau de la Diputació de Tarragona en la que exhibe una parte de su universo creativo. La muestra cuenta con 35 obras al óleo, en formato grande y pequeño, con las que pretende «emocionar» al público. Se puede visitar de manera gratuita hasta el 12 de mayo.

Moreso no siempre es fiel a la realidad que plasma en sus frescos: la transforma para adaptarla a su visión pictórica. «Si un color distorsiona toda la vista, lo cambio», explica. Define su estilo como «figuración deconstruida», una técnica próxima al impresionismo que surgió en Francia a finales del siglo XIX.

Es muy minucioso y detallista; hace un esbozo previo en papel antes de trasladar su idea al lienzo. «Los que nos dedicamos a la pintura lo modificamos todo y tenemos dudas. Yo no salgo y pinto lo primero que veo, sino que lo voy madurando. Hago muchas fotos y cojo lo que me interesa», dice.

Su especialidad temática son las figuras, los paisajes y las marinas. Sus cuadros aluden a lugares de toda la provincia: desde L’Ampolla a L’Ametlla de Mar, pasando por Torredembarra, El Catllar o L’Aleixar. En el Palau de la Diputació expone pinceladas de almendros florecidos, un campo de amapolas, humedales, gallinas, una mujer recogiendo flores o un anciano sentado en un banco en soledad. «A veces pido permiso para retratar a las personas y otras no», reconoce Moreso.

Autodidacta

La muestra no tiene título porque no hay un hilo argumental concreto, más allá de la naturaleza, el mar y la vida corriente de sus personajes. «Pinto en cada momento lo que considero», comenta. 

Moreso, de formación autodidacta, lleva casi toda su vida dedicado a la pintura. Ha expuesto en salas de prácticamente toda la demarcación: en Tarragona, Reus, Cambrils, Vila-seca, L’Hospitalet de l’Infant, Ascó o El Catllar.