Los accidentes laborales han causado la muerte de nueve personas en Tarragona hasta agosto

La siniestralidad laboral en la demarcación de Tarragona ha causado la muerte de nueve personas durante los ocho primeros meses de este año, según informa el Ministerio de Trabajo. En este periodo de tiempo, Trabajo ha contabilizado 6.872 accidentes de trabajo en la provincia, de estos 881 fueron in interine, es decir, que sucedieron durante el camino de ida o de vuelta al trabajo. Los siniestros graves ascendieron hasta 34, 7 de ellos in interine. En el caso de las nueve defunciones, todas fueron durante la jornada laboral. 

En comparación con el mismo periodo del año pasado, se han registrado 42 accidentes laborales más que hace un año, ya que se notificaron 6.830 siniestros laborales hasta el mes de agosto de 2024. Este ligero aumento se debe a los accidentes in interine, ya que se registraron 96 accidentes más de este tipo mientras que los siniestros en el lugar de trabajo fueron 54 menos que hace un año.

No obstante, estos accidentes fueron de menos gravedad que el año pasado. Este año se han registrado siete accidentes graves menos que hace un año, nueve menos durante la jornada laboral y dos más in interine, mientras que se notificaron cuatro muertes menos que durante el mismo periodo del 2024, uno menos en el puesto de trabajo y tres menos in interine. 

En el conjunto de España, los accidentes laborales dejaron 489 fallecidos hasta agosto, nueve defunciones menos que hace un año. La estadística del Ministerio de Trabajo refleja que, aunque hubo un descenso de muertos, la siniestralidad laboral sigue en cifras récord y mantiene una mayor incidencia en los sucedidos durante la jornada de trabajo (398, seis menos) que en los in itinere (91, tres menos).

La mayoría de los accidentes se produjeron en el sector servicios (180), seguido de la construcción (113), la industria (71) y la agricultura (34). Entre los accidentes durante la jornada laboral la principal causa de fallecimiento fue, como es habitual los infartos, derrames cerebrales u otras causas naturales (169), seguido de golpes resultado de una caída (64), los atrapamientos, aplastamientos o amputaciones (54) y los accidentes de tráfico (52).

No obstante, el índice de incidencia de los accidentes mortales es superior en la construcción, con un índice del 0,98, por encima del 0,24 del total, lo que supone que es en este sector donde mayor peso tiene esta siniestralidad sobre el total de trabajadores.

Los sindicatos, a la calle

Ante esta situación, UGT y CCOO se concentrarán el próximo jueves 16 de octubre en Madrid ante la sede de la CEOE para instar a la patronal a que haga cumplir en las empresas las medidas de salud y seguridad laboral y para que pacte en el diálogo social la reforma de la ley de prevención de riesgos laborales, que lleva 30 años sin actualizarse.

Asimismo, los sindicatos urgirán a cerrar un pacto de Estado con medidas urgentes para acabar con el elevado número de accidentes laborales.

Los sindicatos reclaman implementar la figura del delegado territorial de prevención de riesgos laborales, que pueda centrarse en la evaluación de las condiciones de trabajo en las pymes, donde el tamaño de estas empresas, que concentran el mayor índice de accidentalidad, dificulta la creación de este puesto.

También piden más recursos humanos y técnicos para la Inspección de Trabajo, controles aleatorios y medidas y multas más contundentes para los incumplidores, así como una campaña de comunicación y sensibilización a la sociedad.

Desde la patronal, estas mejoras en la ley son vistas como una "una carga más" para las empresas y se resisten a cerrar un acuerdo. El vicepresidente de la CEOE y presidente de la asociación de autónomos ATA, Lorenzo Amor, aseguraba la semana pasada que la reforma de la ley de prevención se sumará a otras normas puestas en marcha y a las "fuertes cotizaciones a la Seguridad Social" que suponen un incremento de costes para las empresas.

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, advertía recientemente de que la CEOE está poniendo "muchísimas dificultades" para cerrar un acuerdo la acusaba de "no tener vergüenza".

Por su parte, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, anunciaba que se cerrará un acuerdo el próximo mes de noviembre de una reforma que "es inaplazable y exige un acuerdo de diálogo social ya".