Bruselas estudiará la compra de gas y crear una reserva ante la crisis energética

La Comisión Europea descarta grandes cambios este invierno y apuesta para dar ayudas a los más vulnerables

13 octubre 2021 10:49 | Actualizado a 13 octubre 2021 11:16
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La Comisión Europea estudiará la compra conjunta de gas y la creación de una reserva estratégica para hacer frente a la crisis energética, pero descarta grandes cambios este invierno para hacer frente al aumento del precio de la energía. En la propuesta que ha presentado este miércoles para paliar los efectos del incremento del precio de la energía, el ejecutivo comunitario no prevé grandes cambios para frenar el aumento de los precios este invierno y se limita a recomendar en los estados que den ayudas o aplazamientos de las facturas a los más vulnerables, así como también reducciones temporales de impuestos o apoyo a empresas.

Entre las medidas a corto plazo, Bruselas plantea la necesidad de mejorar la transparencia, la liquidez y la flexibilidad del mercado energético internacional, así como de investigar posibles prácticas contra la competencia y facilitar un acceso más amplio en los acuerdos de compra de energía renovable. También insta los estados a crear garantías para evitar las desconexiones de la red eléctrica.

Las ayudas a los más vulnerables y a empresas se tienen que financiar a través del dinero  de los títulos del mercado de carbono

Por la Comisión Europea, las ayudas a los más vulnerables y a empresas se tienen que financiar a través del dinero que reciben los estados de los títulos del mercado de carbono –el que pagan las industrias para contaminar más del permitido-, y de diferentes impuestos, como por ejemplo los medioambientales o del precio de la electricidad.

De media, los impuestos representan el 41% de la factura eléctrica de los hogares de la Unión Europea y entre el 30% y el 34% en el caso de la industria. En el caso del gas representan el 32% para los hogares y entre el 13% y el 16% para la industria. Es por este motivo que Bruselas plantea, por ejemplo, rebajar el IVA a los más vulnerables.

  • Compra conjunta de gas y reserva estratégica
En cuanto a las reservas de gas, el ejecutivo comunitario apunta que son más bajas que en años anteriores, pero que son adecuadas para pasar el invierno. Con todo, Bruselas defensa que hace falta "una estrategia más integrada" al club comunitario porque contribuiría a «optimizar los costes y los beneficios del almacenamiento de gas» y «paliar la volatilidad de los precios de la energía». La Comisión Europea presentará una propuesta de reforma del mercado del gas en diciembre. 

La transición a una energía limpia es la mejor garantía contra los choques en los precios en el futuro.

Además de estudiar la compra conjunta de gas, que sería voluntaria, y la creación de una reserva estratégica, la Comisión Europea plantea entre las acciones a medio y largo plazo incrementar la inversión en renovables. «La transición a una energía limpia es la mejor garantía contra los choques en los precios en el futuro», dice el documento, argumentando que así se depende menos del gas.

Además, el ejecutivo comunitario abre la puerta a introducir en el futuro cambios en el mercado eléctrico existente después de que encargue a los reguladores analizar los beneficios e inconvenientes del actual diseño.

La compra conjunta de gas es una de las iniciativas que ha defendido en las últimas semanas el gobierno español, así como también los ejecutivos otros estados. Con todo, el gobierno español también reclamaba desvincular el precio de la electricidad y el del gas, cosa que Bruselas descarta por ahora.

  • El precio de la energía se mantendrá por encima de la media el 2022
Según la Comisión Europea, el incremento del precio de la energía responde a cuatro factores. El primero es el aumento de la demanda global de gas por la recuperación económica que no ha ido acompañado de un incremento de la oferta. Además, las condiciones meteorológicas hacen que caiga la producción de energía renovable porque hay menos viento y agua que en verano. En tercer lugar, los precios del mercado de carbono europeo también han aumentado, así como lo del gas, que representa un cuarto del consumo total de energía en la Unión Europea.

Bruselas plantea rebajar el IVA a los más vulnerables.

En la Unión Europea 31 millones de personas –el 7% de la población- sufren pobreza energética. Además de las repercusiones sociales del aumento del precio de la energía, a la Comisión Europea también le preocupa que este incremento afecte las empresas y, por lo tanto, la recuperación económica, las cadenas de suministro y la inflación.

Según los cálculos de Bruselas, el incremento del precio de la energía será "temporal", pero no empezarán a caer hasta abril del 2022. A pesar del descenso en la primavera, se prevé que el precio se mantenga más altos que la media de los años anteriores.

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