La subida de las cotizaciones costará 2 euros al mes al trabajador y 10 a la empresa

El acuerdo alcanzado entre Gobierno y sindicatos para sufragar el aumento del gasto de las pensiones deja la puerta abierta a más medidas, tal y como reclaman algunos expertos

17 noviembre 2021 13:20 | Actualizado a 18 noviembre 2021 06:51
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

El acuerdo de subida de las cotizaciones alcanzado el pasado lunes por la noche entre el Gobierno y los sindicatos para sufragar el incremento del gasto de pensiones previsto con la jubilación de la generación de los ‘baby boom’ supondrá unos dos euros al mes para los bolsillos de los trabajadores y de unos diez euros para las empresas.

En el acuerdo sobre el nuevo Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), las cotizaciones sociales de todos los trabajadores se incrementarán 0,6 puntos, de los que las empresas sufragarán cinco céntimas y los empleados la décima restante.

Actualmente, las compañías pagan un 23,6% de la base de cotización del afiliado en concepto de contingencias comunes, por lo que ahora pasarán a abonar el 24,1%. Por su parte, el trabajador abona a la Seguridad Social en estos momentos un 4,7% de su base de cotización por contingencias comunes y se elevará al 4,8% una vez se aplique el MEI. De esta manera, el tipo de contingencias comunes subirá hasta el 28,9%.

Con este mecanismo, que no ha contado con el respaldo de la patronal por entender que supone una nueva subida de los costes laborales para los empresarios, el Gobierno espera recaudar unos 50.000 millones de euros.

La aportación de cada trabajador y de la compañía a esta subida de las cotizaciones variará dependiendo de la base de cotización. Así, por ejemplo, para una base de cotización media, situada en 1.976,42 euros, representará 1,98 euros de su salario bruto mensual, mientras que las empresas asumirán 9,88 euros.

Menos tendrán que pagar los que coticen por la base mínima (1.125 euros al mes), que pagarán un extra de poco más de un euro, mientras que el coste para la empresa subirá hasta los 5,6 euros al mes. Por último, para las bases máximas de cotización la medida supondrá un encarecimiento de 24,84 euros al mes, de los cuales 4,14 euros los tendrán que abonar los trabajadores y los 20,7 restantes, los empresarios.

¿Cuándo entrará en vigor?

La subida no se aplicará el próximo año, sino que entrará en vigor en 2023 y se mantendrá a lo largo de una década, es decir, hasta 2032.

También cabe la posibilidad de que este encarecimiento se extienda en el tiempo. El acuerdo firmado deja la puerta abierta a tomar nuevas medidas, entre las que figuran una nueva subida de cotizaciones o incluso «otras fórmulas alternativas para aumentar los ingresos», si a partir de 2033 se apreciara en los Informes de Envejecimiento de la Comisión Europea una desviación de la previsión de gasto en pensiones a 2050 respecto al informe de 2024 y no fuera suficiente con utilizar el fondo de reserva.

Más medidas

Algunos de los expertos consultados por el Diari coinciden en esta última posibilidad de que sean necesarias más medidas para poder asumir el aumento del gasto de las pensiones en los próximos años. Antonio Terceño, decano de la Facultat d’Economia i Empresa de la URV y catedrático de Economía, califica la subida de las cotizaciones pactada entre Gobierno y los sindicatos de «medida razonable», aunque va un poco más allá y advierte de que «por sí sola no conseguirá nada».

Según Terceño, «estamos ante un tema de equilibrio entre ingresos y gastos. Cuando hablamos de gastos tenemos algo inevitable y es que cada vez tendremos más pensionistas a los que hay que pagar. En un máximo de 10-20 años, un 21% de la población tendrá entre 50 y 64 años. Y en 25 años, el 37% de la población tendrá más de 40 años».

La pregunta es bien sencilla: ¿Qué hacemos para solucionar el problema? Para este economista, «en el capítulo de gastos, poca cosa se puede hacer. Creo que bajar las pensiones no es la solución porque sería cargarse el estado del bienestar. Por lo que solo quedaría acercar la edad legal de jubilación a la edad real. Es decir, tenemos que alargar un poco más la vida laboral».

Por lo que se refiere a los ingresos, Terceño explica que habría varias posibilidades. «Primero, incrementar las cotizaciones para hacer un fondo, que es lo que se ha aprobado ahora. La medida está bien y creo que la cantidad es razonablemente pequeña», comenta el decano de la Facultat d’Economia i Empresa, quien añade que «otra opción, en cuanto a los ingresos, sería que parte del dinero de las pensiones saliese de los presupuestos, pero se dejarían de hacer cosas». Por último, otra solución pasaría «por tener más gente cotizando, que bajen los niveles de paro del país. Algo complicado si tenemos en cuenta que incluso en las mejores épocas de empleo no hemos conseguido bajar del 8% de paro», concluye Antonio Terceño.

Comentarios
Multimedia Diari