Un momento clave

«El proyecto ‘Cal·lípolis Next Generation’ es una apuesta por contribuir a la dinamización del territorio»

11 junio 2021 09:39 | Actualizado a 12 julio 2021 17:36
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

El El Port de Tarragona ha entrado en un momento clave para su futuro como nodo logístico de primer nivel. Si bien es cierto que 2020 ha sido muy duro y al inicio de la pandemia esperábamos disminuciones del 30% de los tráficos marítimo, finalmente el Port ha cosechado mejores resultados de los estimados. Hemos cerrado el año mantenido la séptima posición del sistema estatal con 26,8 millones de toneladas movidas y entrando por primera vez entre los 30 primeros puertos de la Unión Europea.
Pero la actividad de un puerto va más allá de las toneladas anuales que es capaz de mover. Durante los últimos años los puertos dejaron de ser simples operadores portuarios para convertirse en verdaderos nodos logísticos y dinamizadores económicos del hinterland.

El proyecto ‘Cal·lípolis Next Generation’ es un buen ejemplo. Con sus 11 proyectos y sus inversiones por valor de 260 millones de euros, es una apuesta por situar el Port entre los más avanzados del Mediterráneo y, a la vez, contribuir   a la dinamización del territorio y al progreso de sus empresas y habitantes.

La colaboración con el Ayuntamiento de Vila-seca, Repsol el Ayuntamiento de Tarragona, URV, Cámaras de Comercio y muchos otros actores, convierten este megaproyecto en una apuesta que impacta positivamente en la recuperación económica sostenible en los tres sectores estratégicos de nuestras comarcas: turismo, petroquímica y logística. Un ejemplo de confluencia de intereses que será un revulsivo económico y social en estos tiempos complejos y de cambio.

Con o sin fondos de la Unión Europea, el Port no ha parado nunca de trabajar por mejorar sus instalaciones y sus servicios. El Port del futuro ya está dando sus primeros resultados. El Moll de Balears será una realidad este mismo año, la Zona de Actividades Logísticas cuenta con todos los trámites administrativos para empezar las obras de urbanización, la Terminal Intermodal de Guadalajara iniciará los primeros movimientos de tierras en los próximos días, hemos llegado a un acuerdo para la gestión y potenciación de la Terminal Intermodal de la Boella y, por último, el proyecto del contradique de Els Prats sigue avanzando.

Queda por delante mucho trabajo, pero las bases están puestas y ahora toca coger ritmo para seguir siendo un puerto competitivo con las mejores conexiones marítimas en el Mediterráneo y con Europa por ferrocarril y carretera. La comercialización de la ZAL y la implantación de nuevas actividades contribuirá aumentar el tráfico marítimo y terrestre y a crear entre 2.000 y 4.000 puestos de trabajo y, además, generará claras sinergias con la terminal intermodal de la Boella y con su gemela de Guadalajara, situada a 60 km de Madrid.

Las dos se verán beneficiadas con el acuerdo de explotación de la Boella con Combi Terminal Catalonia, liderada por BASF, que prevé mejorar las instalaciones y operar hasta 8 trenes de entrada y salida al día a partir de 2023. 

Todos estos proyectos harán que, con la entrada en funcionamiento del corredor ferroviario del Mediterráneo, se refuerce el nodo logístico tarraconense como se está demostrando con la nueva línea roro con Turquía.

Todos son objetivos y logros fruto de la colaboración con las empresas de la comunidad portuaria y con las diferentes administraciones, en un momento clave para nuestro futuro como territorio y como país, y a los que desde aquí quiero agradecer su esfuerzo y su profesionalidad.

Comentarios
Multimedia Diari