Modelismo industrial: que se puede ver y tocar

Desde una cafetera a un coche, pasando por una impresora, una máquina de análisis clínico o una motocicleta eléctrica. Cualquier diseño industrial puede ser modelado a escala real para tener una experiencia tangible en la fase de prototipado.

En Engine&Design, en L’Arboç (Baix Penedès), están especializados en el diseño y construcción de modelos y prototipos de producto industrial, mediante el modelado manual en clay y masilla a partir de las primeras ideas o esbozos de diseño.

Con instalaciones en el polígono industrial El Foix, en L’Arboç, esta empresa fundada en 2017 por Albert Gràcia -un modelista industrial que había trabajado para los principales grupos de automoción de Europa durante cerca de una década- ofrece a sus clientes (principalmente, estudios de diseño industrial que trabajan para fabricantes) experiencias completas con el aspecto y el tacto (look and feel) que tendrá un producto industrial para el usuario final.

«Construimos -explica Albert Gràcia- un prototipo estético de cómo será ese producto acabado, con formas, texturas, pinturas...». Se trata de prototipos no funcionales (máquinas de café que no pueden hacer café, motocicletas que no son capaces de moverse), aunque cuidados al detalle para esa experiencia de usuario (puertas que se abren, palancas que se accionan...), para sacar todo el partido de la experiencia sensorial.

«Con la Realidad Virtual o el renderizado -explica Albert Gràcia- no pueden apreciarse igual las proporciones, la textura... pierdes la magnitud del global del producto».

Trabajan para todo el mundo, con clientes internacionales, aunque el grueso de sus encargos llega a través de estudios de diseño (muchos de ellos, emplazados en el área metropolitana de Barcelona) que les subcontratan el modelismo industrial en proyectos de diseño para grandes clientes.

Así es cómo ahora están inmersos en el prototipado estético de dos nuevos modelos de motocicleta eléctrica, uno para un fabricante catalán y el otro para una marca asiática. Sobre este último perfil de proyecto, cuenta Albert Gràcia que «las marcas asiáticas vienen a buscar el diseño europeo, y contratan el diseño a empresas de aquí, con lo cual nuestro target son esas empresas locales de diseño».

Partiendo de un archivo digital o de unos planos, el proceso de preparación, mecanizado y modelado manual de una motocicleta eléctrica puede durar unos 25 días, mientras que construir un show car en clay (un producto en el que están especializados) puede requerir entre cuatro y seis meses de trabajo.