El Port de Tarragona ha superado con éxito la situación derivada del apagón general que afectó ayer lunes a gran parte de la Península. Según ha informado la Autoritat Portuària de Tarragona (APT), la actividad se ha restablecido por completo y actualmente la situación es de total normalidad.
El corte en el suministro eléctrico se produjo a las 12:33 h del mediodía del 28 de abril, lo que llevó a activar de inmediato el Plan de Autoprotección (PAU) en nivel de alerta. Gracias a la puesta en marcha automática de 15 grupos electrógenos —salvo dos que requirieron activación manual— se garantizó el suministro en las sedes de la APT y los principales accesos al recinto portuario.
Aunque la caída de la conexión a internet ralentizó los trámites de salida de camiones, la aplicación del protocolo de crisis permitió gestionar su salida de forma progresiva. Para evitar congestiones, la Policia Portuària habilitó aparcamientos provisionales en el Eje Transversal, facilitando así una circulación ordenada. No se registraron incidentes en el ámbito sanitario ni de orden público.
Durante la tarde y la noche, el suministro fue recuperándose gradualmente, quedando completamente restablecido a la 1:00 h de la madrugada. En todo momento se garantizó el funcionamiento de las instalaciones más sensibles mediante los generadores de emergencia.
El presidente del Port de Tarragona, Santiago J. Castellà, ha explicado que ayer se mantuvo un contacto constante con las instituciones del territorio, incluyendo alcaldías, la Generalitat y el Gobierno central: “Colaboramos en lo que se nos requirió y compartimos información de forma permanente”. Esta mañana, tanto el Comité de Emergencias como el Comité Ejecutivo de la APT se han reunido para hacer seguimiento de posibles afectaciones pendientes. Castellà ha confirmado que “la situación está plenamente normalizada” y que se mantiene el contacto estrecho con la industria química de la zona.
Sin interrupciones en operativas críticas
Las operaciones portuarias continuaron en su mayoría con normalidad. Las grúas, que operan con diésel, siguieron funcionando, a excepción de las situadas en el muelle de Catalunya. Esto permitió mantener sin interrupciones la descarga de sólidos a granel.
Sin embargo, las operativas relacionadas con productos químicos dentro del muelle se detuvieron temporalmente debido a la falta de electricidad en las estaciones de bombeo. Aun así, la descarga de buques pudo llevarse a cabo, ya que se utilizó el sistema de bombeo autónomo de los propios barcos.
Las actividades industriales dependientes de suministro eléctrico, como la manipulación de materias primas y el funcionamiento de básculas de pesaje, también se vieron interrumpidas.
Comunicaciones y servicios esenciales, garantizados
Gracias a los sistemas de alimentación ininterrumpida (SAI), las baterías de respaldo y los grupos electrógenos, los servidores y sistemas de información de la APT se mantuvieron operativos en todo momento, sin cortes en el servicio.
Por otra parte, atendiendo una solicitud de EMATSA, el Puerto cortó el suministro de agua potable a las 14:42 h de ayer para reservarlo a necesidades sanitarias y de abastecimiento a la población. El servicio se restableció hoy a las 7:15 h.
Valoración positiva de la gestión de la crisis
La Autoritat Portuària ha valorado positivamente la respuesta ofrecida durante la crisis, destacando la eficacia de los protocolos activados para preservar la operatividad del puerto, considerado una infraestructura estratégica clave para el conjunto del Estado.