Los trabajos en 2022

Ingenieros, analistas, programadores y especialistas en bases de datos y redes informáticas son algunas de las ocupaciones mejor posicionadas en el mercado laboral catalán

01 febrero 2022 17:33 | Actualizado a 01 febrero 2022 17:40
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

La demarcación de Tarragona cerró el año 2021 con una tasa de paro del 12,62%, tras un descenso anual del 4,85%, según la última Encuesta de Población Activa (EPA) publicada esta misma semana. Con 48.500 personas en situación de desempleo al cierre de 2021 en el Camp de Tarragona y Terres de l’Ebre, se trata de una cifra que reduce en 21.600 personas el número de desempleados de hace un año, y que abre buenas perspectivas de cara a este 2022.

Lo explica Mercedes Teruel, vicepresidenta del comité ejecutivo de la sede en Tarragona del Col·legi d’Economistes de Catalunya (CEC) y directora de la Càtedra per al Foment de la Innovació Empresarial de la Universitat Rovira i Virgili (URV): «Los indicadores son positivos, con cierto dinamismo en el mercado laboral».

«El análisis de la tasa de paro -prosigue- es positivo, porque siempre la hemos tenido por encima de la media catalana, y un 12,62% es bastante positivo. Pero, viendo las diferencias entre hombres y mujeres, donde la tasa de paro de las mujeres antes de la pandemia era inferior, hace pensar en un cambio de actividad económica durante la recuperación».

Mercedes Teruel se refiere, en su análisis, a los más de tres puntos de diferencia en esa tasa de paro entre hombres y mujeres al cierre del año pasado. Mientras que los 23.000 hombres desocupados se reflejaban en una tasa de desempleo del 11,17%, en el caso de las mujeres, con 25.600 desocupadas a finales de 2021, esa tasa alcanzaba el 14,28%.

En ambos casos, tasas de desempleo superiores a la media de Catalunya, que con 395.400 desocupados al cierre de 2021, situó su tasa de paro en el 10,16%, la más baja desde el año 2008. 

Pero la creación de ocupación no solo distinguió por sexos y territorios durante el pasado año, sino que también refleja comportamientos muy distintos en función del sector y tipo de actividad. «Los principales cambios -analiza Mercedes Teruel, del Col·legi d’Economistes de Catalunya- los encontramos en el sector agrícola, donde la ocupación se ha incrementado, en la construcción, que también aumenta respecto a hace dos años, y en los servicios, que en su caso experimentan cierta caída, que se explica por el freno del turismo, que no acaba de recuperarse».

Por sectores, la agricultura incorporó en la demarcación de Tarragona a 2.200 personas en el último trimestre de 2021 y 3.400 en el cómputo anual, hasta los 16.700 ocupados, mientras que el sector que sigue ofreciendo más puestos de trabajo es el de servicios, si bien en el cuarto trimestre el número de personas ocupadas se redujo en 25.200, hasta las 252.100, con una pérdida final, en el cómputo anual, de 10.500 trabajadores. La industria generó más puestos de trabajo, con 6.500 personas más en el último trimestre de 2021, hasta cerrar el año con un total de 65.200 personas ocupadas en este sector.

«Otro problema -alerta Mercedes Teruel- es la elevada temporalidad de los contratos, con gente que va encadenando trabajos. La Covid-19 afecta de forma transversal a todos los sectores, especialmente a algunos, como el turismo o el ocio, pero tengo la sensación de que iremos tendiendo hacia la normalización, y en el sector servicios habrá este año una recuperación del turismo».

«No sé si podemos hablar de una próxima temporada turística prepandémica -reflexiona Teruel-, pero sí de cierta recuperación. Con la incógnita, claro está, de Rusia y otros elementos desestabilizadores que no sabemos cómo pueden afectar al sector turístico».

Con todo esto sobre la mesa, ¿qué ocupaciones aparecen como mejor posicionadas en el mercado laboral en este arranque de año? La herramienta Treball per ocupacions del Observatori del Treball i Model Productiu de la Generalitat de Catalunya da algunas pistas sobre ello.
En su última actualización de finales de diciembre de 2021, ingenieros, analistas, programadores y especialistas en bases de datos y redes informáticas lideraron las ocupaciones mejor posicionadas en el mercado laboral catalán, en un índice que ordena las ocupaciones, de mejor a peor posicionadas, en base a tres criterios: contratación laboral, calidad y demandantes.

La posición en el índice será más elevada cuantos más contratos, de mayor calidad y con menos personas demandantes de ocupación (y durante menos tiempo) a través del Servei d’Ocupació de Catalunya (SOC) haya. Con estas bases, los ingenieros, con una puntuación global de 80,7, aparecen como la ocupación mejor posicionada hoy en el mercado de trabajo catalán. Se trata, en este caso, de todos aquellos ingenieros no clasificados en otras actividades, como serían por ejemplo los ingenieros eléctricos, que con una puntuación de 73,7 ocupan la cuarta posición en este ranking laboral en Catalunya.

Analistas de gestión y organización (con 80,3 puntos, en segundo lugar en este listado), analistas, programadores y diseñadores de páginas web (tercera posición y 73,8 puntos), analistas financieros (73,6 puntos y quinta posición, por detrás de los ingenieros eléctricos), técnicos de seguridad aeronáutica (sexta plaza y 73,2 puntos), programadores informáticos (séptima posición y 73,2 puntos), ingenieros mecánicos (octavos, 72,1 puntos), especialistas en bases de datos y redes informáticas (novenos, 72,1) e ingenieros industriales y de producción (décimos, 72) completan el ‘top diez’ de las ocupaciones mejor posicionadas en el mercado de trabajo catalán.

Cuando se desciende a escala comarcal, sin embargo, el panorama cambia notablemente y refleja algunas particularidades territoriales y sectoriales que pueden tener también componentes muy coyunturales.

En el caso de la demarcación de Tarragona, los ingenieros electrónicos, con una puntuación de 76,2, encabezan el ranking de las ocupaciones mejor posicionadas en el Alt Camp. Se trata de una puntuación que no solo se encuentra por encima de la media de Catalunya (donde este perfil obtiene 68 puntos de promedio), sino del resto de comarcas catalanas.

Los operadores de máquinas para fabricar productos textiles son, con 77,6 puntos, los mejor posicionados en el Baix Camp, también por encima de la media catalana (61 puntos), mientras que en el Baix Ebre ocupan esta primera posición los montadores de estructuras metálicas, con 70,5 puntos (62 en Catalunya) y en el Baix Penedès hace lo mismo el colectivo de ‘otros vendedores’, con 72,2 puntos (61 en Catalunya).

Instaladores de material de aislamiento térmico e insonorización, en la Conca de Barberà (71,6 puntos, 61 en Catalunya), oficiales, operarios y artesanos en otros oficios, en el Montsià (69,7 puntos, 62 en Catalunya), peones agropecuarios en el Priorat (76,6 puntos, 65 en Catalunya), relojeros y mecánicos de instrumentos de precisión en la Ribera d’Ebre (71,4 puntos, 48 en Catalunya), pescadores fluviales y de litoral en el Tarragonès (73,8 puntos, 60 en Catalunya) y empleados de logística y transporte en la Terra Alta (73,7 puntos, 60 en Catalunya) completan la lista de las ocupaciones mejor posicionadas por comarcas.

En casos como el del Tarragonès, puede sorprender esa primera posición de la categoría ‘pescadores fluviales y de litoral’, pero su puntuación no es más que un reflejo de lo que muestra este índice: si en el año 2021 un pescador buscó trabajo de calidad y sin muchos competidores en Catalunya, el Tarragonès era un buen lugar donde encontrarlo. De hecho, era su mejor opción, con la segunda localización en el Baix Empordà (72 puntos, frente a los 74 del Tarragonès) y la tercera en la Selva (66). De la misma forma, si alguien era ingeniero electrónico, las mejores oportunidades de toda Catalunya para este perfil se encontraban en el Alt Camp.

¿Seguirán estando este año estas ocupaciones en posiciones similares o va a haber cambios? Lo esencial, en opinión de Mercedes Teruel, del Col·legi d’Economistes de Catalunya, es que se sigan generando oportunidades y que estas tengan valor. Pone como ejemplo el sector auxiliar de la automoción, que durante el pasado año acumuló problemas en diversas industrias de la demarcación.

«Lo importante -explica- es que se busquen alternativas de transformación de negocio para esos trabajadores afectados, que se busquen inversiones. Y aquí reside la parte más importante desde el punto de vista estratégico del territorio. Siempre hay posibilidades de salida, y como territorio nos encontramos en una buena ubicación».

«Ahora -añade- hay que tratar de aumentar la productividad laboral, porque la recuperación del mercado de trabajo ha comportado una caída de la productividad, y esto es importante. ¿Estamos generando valor añadido? Estamos ocupando mucho, pero con baja producción. Hay que aumentar la calidad de los empleos para aumentar la productividad, y hay mucho margen todavía por delante para que por cada trabajador haya un valor añadido superior».

Comentarios
Multimedia Diari