La Global Sumud Flotilla zarpa hacia Gaza para intentar romper el bloqueo: "Barcelona nunca falla"

Decenas de embarcaciones han zarpado este domingo por la tarde hacia Gaza para intentar poner fin al bloqueo humanitario impuesto por Israel en el marco de la Flotilla Global Sumud. 

Unas 5.000 personas, según datos de la Guardia Urbana, han despedido a los activistas desde el Moll de la Fusta de Barcelona tras dos jornadas de actividades y debates en los que se ha denunciado reiteradamente la "complicidad" y el "silencio" de la comunidad internacional ante el "genocidio" de Israel en Gaza. 

"Barcelona nunca falla", ha celebrado la exalcaldesa Ada Colau, una de las integrantes de la expedición. "Israel es muy claro en sus intenciones genocidas; si eso no hace que la gente se levante del sofá, no sé qué lo hará", ha advertido la activista sueca Greta Thunberg.

Movimientos sociales, sindicatos y representantes del mundo de la cultura catalán y español, así como miles de ciudadanos anónimos, han mostrado su apoyo a la Flotilla desde el Muelle de la Madera y también han despedido a los miembros de sus organizaciones que forman parte de ella.

"Los políticos deberían estar haciendo esto; no tendríamos que estar arriesgando nuestras vidas, porque son ellos quienes pueden exigir el fin del genocidio", ha afirmado Edu Lucas, de la IAC-Intersindical, que forma parte de la expedición catalana que intentará romper el bloqueo humanitario.

En los barcos también viajan Colau, el concejal de ERC Jordi Coronas —que capitanea uno de ellos— y la diputada de la CUP Pilar Castillejo. Representantes políticos de ERC, los Comunes, la CUP, el PSC y Podemos han estado este domingo en el Muelle de la Madera.

La eurodiputada de ERC, Diana Riba, ha denunciado la "inacción" y el "silencio" de la comunidad internacional y de la Unión Europea ante la situación en Gaza. "La UE está prácticamente paralizada, y eso les hace cómplices del genocidio", ha advertido.

El también eurodiputado Jaume Asens, de los Comunes, ha asegurado que es un "orgullo" que Barcelona se haya "convertido en la capital internacional de la solidaridad y la resistencia al genocidio" de Gaza. El eurodiputado ha constatado un "divorcio ético" entre la ciudadanía y los gobiernos occidentales.

"Estamos poniendo el cuerpo en lo que deberían estar haciendo los gobiernos: hacer todo lo posible para detener esta masacre y poner fin al genocidio, abrir un corredor humanitario y permitir que entre ayuda" en Gaza, ha afirmado la diputada de la CUP, Pilar Castillejo.

El PSC ha expresado su apoyo a la Global Sumud Flotilla y ha admitido que considera "perfectamente comprensible" la crítica de la sociedad civil. El presidente del grupo parlamentario socialista, Ferran Pedret, ha destacado, sin embargo, "la posición singular" y "destacada" de España al intentar presionar a la Unión Europea para que aplique un embargo de armas a Israel o suspenda su acuerdo de asociación con el gobierno de Benjamin Netanyahu.

"La indiferencia también es y será siempre criminal", ha advertido el exdiputado de la CUP y activista, David Fernández, que también se ha acercado al Muelle de la Madera para mostrar su apoyo a la Flotilla.

Precisamente, el silencio de la comunidad internacional ante la situación en Gaza ha marcado todo el fin de semana de actividades, conciertos y debates que se han celebrado junto a las aguas del Mediterráneo en Barcelona.

En la rueda de prensa previa a la salida de los barcos, los activistas han afirmado que su acción es imprescindible ante la "complicidad" y la "cobardía" de la UE y Estados Unidos con Israel.

"Estoy aterrada de ver cómo la gente sigue con su vida mientras ve el genocidio en directo por el móvil", ha lamentado Thunberg.

El actor irlandés Liam Cunningham —muy conocido por su papel en ‘Juego de Tronos’— ha señalado que los gobiernos internacionales deberían haber hecho "innecesaria" esta misión deteniendo a Israel. Todo esto, ha dicho, es "una muestra del fracaso del mundo" y de un "vergonzoso periodo de la historia".

"Barcelona ha sido la elección adecuada para iniciar esta misión", ha afirmado el organizador de la Global Sumud Flotilla, Saif Abukeshek. La ciudad, ha dicho, "es el referente de la solidaridad con Palestina".

La exalcaldesa de la ciudad, Ada Colau, ha celebrado que la movilización social ha logrado que "instituciones cobardes que no se atrevían a moverse se hayan visto obligadas a posicionarse" sobre Gaza.

"Si Gaza no se rinde, nosotros tampoco podemos hacerlo", ha afirmado la exalcaldesa, que también ha hecho un llamado a forzar a toda la comunidad internacional a romper relaciones con Israel —como ya hizo Barcelona— e imponerle sanciones.

Por su parte, el actor Eduard Fernández ha afirmado que Gaza "es un espejo" para la sociedad y que cada embarcación es un acto de "dignidad". Fernández ha recordado que el mar Mediterráneo "se convierte en una tumba cuando se niegan los derechos humanos en tierra".

Esta será la cuarta expedición que intenta llegar a Gaza, ya que los intentos anteriores fueron frenados en aguas internacionales. En este sentido, el activista y organizador de la Flotilla, Thiago Ávila, que ya participó en una embarcación hace unos meses, ha pronosticado que esta vez no los detendrán.

Cuando se les ha preguntado si hay un "plan B", Thunberg ha respondido que, en todo caso, sería "volver siendo todavía más". La activista ha insistido en que el objetivo es que las decenas de embarcaciones atraquen en Gaza con ayuda humanitaria y "rompan" el bloqueo "ilegal" de Israel.

El escritor y humorista irlandés Tadhg Hickey ha explicado que preferiría no participar en esta campaña, entre otras cosas porque tiene familia en casa y no le gustan los barcos. Pero ha subrayado que, ante la falta de acción de los gobiernos, que no imponen "sanciones", la sociedad civil actúa. Hickey ha criticado que no se impongan medidas contra Israel pese al “exterminio” diario que comete.

Los organizadores han detallado que unas cuarenta nacionalidades se han sumado a la misión y que cuentan con unas 300 personas implicadas. Una expedición que también cuenta con el apoyo de puertos de Grecia y Túnez, desde donde parten otras embarcaciones que se unirán a la Flotilla.