La acumulación de basuras en calles de Cunit vuelve a ser una constante sin que parezca que se le pueda poner freno. Todo tipo de residuos se acumulan junto a las baterías de contenedores y en las aceras para indignación vecinal y la insalubridad supone.
A la necesidad de actualizar el contrato de recogida de basuras que incremente frecuencias de paso para la recogida o el modelo que se aplique, se une un elevado grado de incivismo.
Gran parte del material tirado en la calle o podría llevarse a la deixalleria municipal, o lo recoge el Ayuntamiento gratuitamente si se avisa o debe ir a los depósitos de papel, vidrio o plástico. Pero muchos prefieren tirarlo en la calle.
Vecinos de Cunit explican que hay ocasiones en las que minutos después de una recogida de emergencia por la acumulación de basuras, la zona vuelve a estar llena de restos de poda, muebles y todo tipo de basuras.
El problema es que Cunit arrastra un contrato de hace años que además se recortó un 30% con la consecuente reducción del servicio. Ese tijeretazo fue por la deprimente situación económica del Ayuntamiento.
Cuando pudieron recuperarse las finanzas, el actual consistorio propuso ampliar los servicios para recuperar los originales, pero la Comissió Assessora Jurídica de la Generalitat lo desestimó y dio dos opciones: o una nueva contrata o indemnizar a la empresa con varios millones de euros.
El Ayuntamiento ha optado por realizar un nuevo contrato ajustado a la realidad de Cunit con su aumento de población y necesidades de recogida. El objetivo es que pueda adjudicarse y funcionar el próximo año. Pero hasta entonces debe pasar con lo que tiene. También con una maquinaria muy anticuada.
El nuevo contrato ya se está diseñando. El Ayuntamiento comprará la maquinaria para que la concesión sea por el servicio, lo que puede suponer un ahorro. Ahora el contrato es de unos 4 millones de un presupuesto municipal de 23 millones.
Hasta entonces se pide a los vecinos civismo. En los próximos días abrirá una nueva deixalleria municipal donde puede llevarse todo tipo de material y que en función de las visitas que se hagan puede suponer una rebaja del recibo de hasta un 50%.
Sobre el modelo de recogida, se prevé un sistema mixto entre el puerta a puerta para las zonas más residenciales con vivienda unifamiliar y los contenedores que se abren con tarjeta en las áreas más urbanizadas. En todo caso parece que los modelos irán por la retirada de contenedores de la vía pública, lo que exige implicación de los vecinos.
El nuevo contrato prevé un modelo mixto de puerta a puerta y contenedor inteligente
