Torredembarra va a peatonalizar la calle Girona antes de que termine el año. Este es uno de los proyectos que el Ayuntamiento tiene en mente ejecutar una vez haya pasado la temporada de verano y cuya financiación estará sostenida, en parte, por el Servei Català de Trànsit gracias a la línea de subvenciones para promover una movilidad más segura y sostenible en el ámbito urbano. Así, del total del coste del proyecto, 208.000 euros, 150.000 provendrán de fondos de la Generalitat.
La peatonalización de la calle Girona era un tema que el consistorio torrense ya tenía previsto porque, según explica el alcalde del municipio, Eduard Rovira, «es, junto con la calle Lleida, uno de los dos trozos que empalman con la plaza Catalunya», actualmente en plena remodelación. La idea, pues, estaba sobre la mesa. «Entonces salió esta nueva subvención del Servei Català de Trànsit y vimos que el proyecto de la calle Girona se adaptaba perfectamente a las condiciones que se pedían para acceder a ella», manifiesta el alcalde. Finalmente, Torredembarra logró la ayuda por el importe máximo al que se podía optar, esos 150.000 euros. Una vez realizadas las obras quedará pendiente peatonalizar la calle Lleida, el otro eje de acceso a la plaza Catalunya. Esto se hará más adelante, «para evitar continuos cortes de tráfico y de acceso a los viales de toda esa zona».
El total a repartir de la subvención convocada por el Servei Català de Trànsit asciende a unos 10 millones de euros. De éstos, el Camp de Tarragona recibirá 626.000 para financiar diferentes proyectos destinados a promover una circulación más sostenible, mejorar el tráfico y reducir el riesgo de accidentes dentro de los municipios. En total hay 91 localidades de toda Catalunya que se han beneficado de esta aportación, habiéndose presentado proyectos de 226 ayuntamientos. En Tarragona, las poblaciones que recibirán una subvención para desarrollar diferentes proyectos, a parte de Torredembarra, son Vilanova de Prades, Riudoms, El Catllar, Bràfim y Bellmunt del Priorat.
Una plaza renovada
Las obras de la plaza Catalunya, que arrancaron el pasado 3 de octubre, avanzan, según asegura Eduard Rovira, a buen ritmo, y previsiblemente estarán terminadas en Semana Santa, es decir, a principios de abril.
Los trabajos, cuyo coste asciende a 480.518,99 euros (IVA incluido), se dividen en tres fases, de las cuales se están ejecutando las dos primeras, que deben finalizar en febrero. Luego quedará pendiente una última que dará por concluida la remodelación.
Con este lavado de cara, la plaza Catalunya se convertirá en un espacio con una gran zona verde que estará, además, protegido del tráfico. En cuanto a la zona verde, se instalarán dos franjas de vegetación que harán de separador entre la zona de peatones y la vía de circulación de vehículos. En cuanto a los árboles, en el interior de la plaza se mantendrán los que ya existen ahora. En cambio, en las aceras perimetrales se plantarán unos de nuevos pero de tamaño más reducido, que servirán para acompañar al recorrido del propio vial.
Finalmente, en el centro de la plaza se instalará una pérgola y un escenario. La pérgola tendrá una cubierta de acero e incorporará un entramado de madera, que cubrirá el escenario y dará sombra al escenario principal. Éste acogerá pequeños conciertos, actuaciones o celebraciones, entre otros espectáculos.
