Josep Puvill, Víctor Corbí, Toni Zúñiga y Gerard Torres tenían cuentas pendientes desde hace más de una década. Los cuatro amigos querían formar un grupo de música a toda costa, pero los compromisos personales de cada uno fueron demorando el proyecto, hasta que en 2020, en plena pandemia, retomaron la idea «después de un café poco inocente».
Nôrte nació en Tarragona de las cenizas de otras formaciones, Ego, Zhentralia, Circle of Death o Natural Disasters, en las que estos cuatro músicos habían tocado, y enseguida se puso a producir temas. En apenas tres años de vida ya ha sacado tres EP. Esta noche, a las 22.00 horas, presentará el último, Contrarreloj, en la Capsa de Música. Será su primer concierto en casa.
«Estamos impacientes por compartir nuestra música con nuestro público más cercano. Esperamos que sea bastante íntimo y especial», explica Josep Puvill, guitarrista de la banda.
La propuesta de Nôrte se mueve en el pop rock alternativo, con influencias de Supersubmarina, Izal, Viva Suecia, Dinero, Radiohead, Biffy Clyro, Oasis o Foo Fighters. «Todos tenemos en común una base muy rockera que luego adaptamos a nuestro modo. Por suerte, creemos que cada vez estamos más cerca de conseguir un estilo lo más propio posible», comenta Gerard Torres, voz y guitarra.
La verborrea creativa del grupo le ha llevado a disponer ya de un repertorio de catorce canciones para explayarse en directo. A nivel compositivo son muy prolíficos. «Tenemos una forma de componer 100% democrática. Las ideas se trabajan desde la total transparencia y cooperación. Ni te imaginas lo importante que es para nosotros este punto», asegura el batería Toni Zúñiga.
Si todo va según sus previsiones, a finales de este año entrarán en el estudio para grabar el que será su primer larga duración. «El disco lo producirá uno de los grandes de la industria musical», avanza Puvill. ¿Quién? «Iremos informando poquito a poquito», ríe.
Nôrte ha cogido carrerilla y la semana que viene –el sábado 17– volverá a actuar en Tarragona, esta vez en la Sala Zero. Compartirá escenario con los también tarraconenses Patricios. «No sabemos si es fácil o arriesgado, pero surgió la oportunidad y no quisimos decir que no a tocar en una de las salas de referencia ya no solo de la ciudad. Por suerte, según se mire, mucha gente que no podrá ir a vernos hoy lo podrá hacer el 17, así que estamos muy contentos de tener esta segunda fecha», apunta el bajista Víctor Corbí.
De momento, pueden estar satisfechos: hacer doblete en Tarragona en tan poco tiempo no es nada fácil, y menos para una banda emergente. «Aunque existen muchos grupazos, aquí no tenemos la misma tradición de ir a conciertos de bandas nuevas que en otras ciudades, como Barcelona o Madrid», concluye Puvill.
