Una historia de Berlín

‘Mauermädchen’. La fotografía de dos chicas ante el Muro despierta la curiosidad de una joven madrileña

28 marzo 2023 12:30 | Actualizado a 30 marzo 2023 14:27
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El 13 de agosto de 1961 la ciudad de Berlín se despertó con un gran muro de hormigón que separaba el oeste, bajo jurisdicción de los aliados (estadounidenses, británicos y franceses) y el este, que quedó en manos soviéticas. Esa lengua gigante gris de 155 kilómetros y 4,2 metros de altura que atravesaba toda la ciudad, se mantuvo en pie hasta el 9 de noviembre de 1989. Una decisión política herencia de la II Guerra Mundial y de la Guerra Fría que interrumpió de golpe la vida de todos los berlineses durante casi 30 años, impidiendo la libre circulación entre ossis (alemanes del este) y wessis (alemanes del oeste).

Elena Oroño es una estudiante madrileña que se encuentra realizando una beca en el museo Treptow de Berlín. Curiosa desde la niñez, una mañana observa absorta una bella fotografía: dos mujeres en el verano de 1961 juntando sus manos sobre el Muro todavía a medio construir; las Mauermädchen (las chicas del Muro). A su lado, un joven soldado que sostiene una flor en la mano.

«La belleza de una buena fotografía no está en lo que muestra, sino en aquello que oculta», es la primera frase del libro de Jorge Corrales. Y ante una persona como Elena, cuya abuela definía como alguien que «disfruta sentándose a mirar», las preguntas empiezan a rondarle: ¿quiénes son esas dos chicas? ¿Qué se decían en ese momento? ¿Qué sentían? ¿Porqué el soldado tiene una flor? ¿Qué relación unía a las dos jóvenes? ¿Cuál es su historia? Y la pregunta más insistente: ¿qué pasó con ambas y dónde están ahora?

«Esta es tu historia. Por alguna razón esta fotografía se te ha metido dentro y no la puedes sacar. Y la única manera de que salga de ti es que cuentes esta historia que hablas su mismo lenguaje. El lenguaje de las historias»

Elena se sumerge en una ardua investigación sobre estas dos jóvenes cuyas vidas se truncaron ese infame agosto alemán ante ‘el Muro de la vergüenza’. Pero no está sola: Nelly, una pizpireta alemana, se ha convertido sin querer, a lo largo de los meses, en una buena amiga para Elena. Su participación será indispensable para llegar hasta el fondo de todas las cuestiones que despiertan esa fotografía histórica, para entender Berlín «y todas sus malas historias» y la diferencia entre las dos secciones que sobrevino de la separación de la ciudad. Pero, sobre todo, Elena y Nelly conocerán cuál es el significado de una verdadera amistad. Porque, como dice Jorge Corrales, «ningún muro puede retener una buena historia, real o de ficción. Ni tampoco una buena amistad».

Si bien la trama de Elena y su compañera Nelly es ficticia, el relato de Kriemhild y Rosemarie es totalmente verídico y algunos medios germanos se hicieron eco de ello algunos años antes de la pandemia.

La primera novela de Corrales es un bello paseo por Berlín, algo que resulta muy especial para alguien que, como servidora, vivió una temporada en Alemania, así como un breve repaso por nuestra historia reciente, con un momento que todavía hace sacar los colores a una sociedad que inteligentemente intenta aprender de sus errores. Pero, sobre todo, el entrañable Las chicas del muro es un libro perfecto para apreciar el valor eterno de la amistad honesta y real. Welt ist schön...

$!Una historia de Berlín

Título: Las chicas del muro

Autor: Jorge Corrales

Editorial: Ediciones B

Páginas: 400

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