Estar en la élite del hockey europeo conlleva sus consecuencias para un Reus Deportiu y un Calafell que han entrado de lleno en una etapa de la temporada en la que casi se juega más que se entrena. No hay respiro para dos equipos que ya se han sumergido en un calendario infernal en el que no hay tiempo para el desasosiego.
Hay tres competiciones en juego que exigen cada día dar el máximo en la oficina. Tres pruebas de fuego para dos plantillas que deben demostrar que están preparadas para el reto tanto a nivel de talento como de fondo de armario.
La fase regular de la OK Liga y la Champions League ya están en plena disputas, mientras que la Copa del Rey aparece en el horizonte.
Tras debutar en la fase final de la Champions League, Reus y Liceo regresan a la OK Liga para completar la 16ª jornada en la noche de hoy, miércoles. Dos partidos que obligarán a dar el máximo al cuarto y quinto clasificado de la OK Liga, respectivamente.
El Reus Deportiu tiene una visita ante el Caldes (21.00 horas) que no va a permitir sesteos. Los de Jordi García son 4º con 34 puntos y un triunfo les permitiría escalar hasta la tercera posición y quedarse a tiro de la segunda posición que en estos momentos ocupa el Liceo con 39 puntos. Todo pensando en un futuro play-off por el título en el que lo prioritario es quedar entre los cuatro primeros para disponer del factor cancha en las primeras eliminatorias del KO.
La visita a Caldes cerrará el mes de enero y dará paso a un mes de febrero en el que los reusenses van a disputar hasta seis partidos entre OK Liga y Champions League. Noia, Barcelos, Vilafranca, Liceo, Sporting y Lleida son los dos durísimos partidos que tienen por delante los de Jordi García. No habrá choque fácil en el horizonte y para postre en marzo espera la Copa del Rey en Calafell.
La zona noble
A estar en esa zona noble también aspira el Calafell que cada vez es menos sorpresa. Es una realidad y los de Ferran López tienen hoy un encuentro de alta exigencia. El Lleida visita el Joan Ortoll (20.00 horas) en un partido que apunta a decantarse por detalles y que va a medir la capacidad de los de Ferran López de afrontar más de un partido por semana.
El Calafell es quinto con 30 puntos y tiene una brecha de siete puntos que podría ser de 10 dígitos con el Igualada, sexto clasificado. Eso le permite ir con tranquilidad en un curso en el que ya le espera la Copa como anfitrión y ya tiene casi cerrado un billete en el play-off por el título de la OK Liga. Precisamente su rival hoy, el Lleida, ocupa la última posición que da derecho a ello, la octava.
Los de Jordi Garcia son cuartos ahora mismo mientras que los de Ferran López, quintos
