En 2001 Aznar invitó a cenar a Pujol. Hablaron de un preacuerdo logrado entre los portavoces de sus partidos, Mariano Rajoy y Xavier Trias, para que los coches pudieran llevar CAT en su matrícula. Aznar lo rechazó y dijo sarcástico a su interlocutor: Si queréis poned una referencia sobre otras cosas, por ejemplo, «a mí me gusta el jamón serrano».
Por entonces Pujol nos invitó a Maldonado y un servidor a una cena en la Casa dels Canonges. Por cierto, no comimos jamón. A los postres se presentó sin previo aviso Xavier Trias, que se sentó a la mesa. Fue el conseller con quien Pujol se sentía más a gusto, un amigo.
En 2011, en su tercer intento, Trias accedió a la alcaldía de Barcelona, hasta ser desalojado por Ada Colau en 2015. Ahora será él quien le sustituya.
