Reus, la undécima ciudad española con más demanda de viviendas de alquiler

El precio, la universidad, su dinamismo comercial, sus servicios y sus buenas comunicaciones con otras localidades de su entorno, entre los reclamos. Salou ocupa el puesto 17 en la lista

30 mayo 2023 20:39 | Actualizado a 31 mayo 2023 07:00
Se lee en minutos
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Se alquila piso de tres habitaciones de 115 metros cuadrados en la avenida Països Catalans por 600 euros al mes. Por 850 hay uno en la calle General Moragues de cuatro habitaciones y 120 metros cuadrados. O uno de dos habitaciones y 90 metros cuadros en la plaza Prim por 775 euros. Son tres ejemplos de viviendas que Idealista ofrece en Reus. El portal inmobiliario ha elaborado una lista con las ciudades españolas con más demanda de inmuebles de alquiler en el primer trimestre de 2023 y la capital del Baix Camp aparece en el undécimo puesto –el cuarto en Catalunya–. Torrejón de Ardoz, Hospitalet de Llobregat y Vitoria copan las tres primeras posiciones de un ranking en el que también salen Salou (17) y Tarragona (39).

El precio es uno de los factores decisivos. Según Idealista, un alquiler medio en Reus cuesta 645 euros al mes, un 11,9% menos que en Salou (732 €) y un 18,5% menos que en Tarragona (791 €). «A la hora de buscar una vivienda en la provincia con un presupuesto más reducido es más probable que los interesados se decanten por vivir en Reus antes que en localidades de costa», explica Francisco Iñareta, portavoz de Idealista.

Es el caso de Anais, enfermera de Vila-seca, que se mudó a un piso del Raval de Santa Anna de una habitación y parking por el que paga 570 euros al mes. Vive con su novio. «Estuve tiempo buscando por mi pueblo y por Tarragona, donde trabajo, pero no encontré nada que se ajustase ni a lo que quería ni a mi bolsillo. Amplié el radio a Reus y vi este piso, más económico y donde estoy muy a gusto. Además, los dos estamos a solo veinte minutos en coche de nuestros trabajos», cuenta.

El mercado inmobiliario le fue propicio a Anais, pero esa no es la tónica general. «Aquí siempre ha habido demanda, pero hay pocos inmuebles en stock, como sucede en muchas ciudades. La mayoría son de particulares y, en menor medida, de entidades bancarias. Y son casi todos de segunda mano, a reformar; de obra nueva apenas hay», apuntan desde una céntrica inmobiliaria reusense. La oferta, aseguran, está repartida por igual por toda la ciudad, salvó en los barrios Sant Josep Obrer y Gaudí, «donde, al menos nosotros, no disponemos de ninguna vivienda».

El Pla Local d’Habitatge de Reus 2022-2025 ya incide en la poca oferta de alquiler en el mercado libre y la escasez de nuevas construcciones. «Existe un desequilibrio entre el volumen de oferta y la demanda de alquiler», advierte Héctor Simón, director de la Càtedra Unesco d’Habitatge de la Universitat Rovira i Virgili (URV).

Difícil acceso a la propiedad

Simón matiza que este fenómeno no es exclusivo de Reus y «se explica por las dificultades para acceder a una vivienda en propiedad desde la crisis financiera de 2007, agravada por la ley del mercado hipotecario, que comporta, a la vez, una presión y burbuja en el mercado de alquiler. De hecho, la propiedad de una vivienda con hipoteca es más asequible que un alquiler, pero los jóvenes con menos ingresos y contratos temporales están prácticamente excluidos por que no superan los test de solvencia de las entidades de crédito, por lo que se buscan el alquiler».

Otros de los factores que mantienen al alza la demanda en la capital del Baix Camp son su condición de ciudad universitaria, su dinamismo comercial y sus servicios, así como su gran oferta cultural y sus buenas comunicaciones con las localidades de su entorno. Buena parte de la inmigración que recibe procede de otras parte de Catalunya y del resto de España, «lo que puede indicar que van en busca de oportunidades laborales», señala Simón.

Reus es, junto con Tarragona, uno de los grandes epicentros de la provincia. «Su influencia sobrepasa su comarca y se extienda hacia las vecinas del Alt Camp, Priorat y, sobre todo, Tarragonès, con la que tiene importantes relaciones de movilidad residencia-trabajo (de base diaria) y por compras y ocio (de base periódica)», añade el director de la Càtedra Unesco d’Habitatge de la URV.

En cuanto al tipo de inmueble, la pandemia ha cambiado las preferencias de los demandantes. Ahora se buscan viviendas con jardín o terraza para disfrutar de espacio al aire libre. El confinamiento supuso un punto de inflexión. Y en este contexto, el distrito de Ponent, que aglutina casas con estas características, se erige como una de las zonas que despiertan más interés.

Respecto al parque de viviendas de protección oficial, el registro de la ciudad cuenta con 364 inscritos, según el Pla Local d’Habitatge. El perfil mayoritario, un 42%, es el de personas entre 35 y 49 años; seguidas de los de 50 a 64 años (25,8%). Más de la mitad, un 54%, pide un alquiler, frente al 21% que prefiere compra.

Comentarios
Multimedia Diari