El Ayuntamiento de la ciudad apuesta por la comida saludable y la promoverá en las máquinas dispensadoras de los equipamientos municipales, al menos a partir de lo que quedaría de año. El objetivo es propiciar un estilo de vida saludable, cambiando la oferta de bollería y azucarados por fruta o cereales. Esta voluntad se manifiesta con una acción que contempla el Pla Local de Famílies de Reus (2022-2025), presentado el pasado mayo.
El documento municipal fija, respecto a la promoción de máquinas dispensadoras saludables, un calendario de puesta en marcha y de duración que va desde este año actual al 2025, el periodo del propio plan. Aun así, no ha trascendido calendario concreto de la puesta en marcha de la acción, confirman fuentes municipales.
La opinión de las familias consultadas sobre el cambio de oferta de las máquinas dispensadoras saludables es positiva. Algunas establecen que, todo lo que sea incentivar los buenos hábitos «bienvenido sea» y otras son de la opinión de que «la alimentación es algo que se tiene que trabajar en casa, algo básico», comentan.
La presidenta del grupo de apoyo a la lactancia materna Mareus, Mar Torres, valora: que esta oferta más saludable esté en las máquinas de equipamientos municipales, «como lo podría ser un centro cívico, nuestra segunda casa, daría más visibilidad al buen hábito y como iniciativa en sí, tiene buen fondo, aunque la alimentación saludable es algo que traemos aprendido de casa». La representante del colectivo de madres lactantes expresa que hay que tener presente, también, los comercios de proximidad. «Tal vez el precio de una manzana en una máquina dispensadora es superior a una fruta que puedes comprar en una frutería», señala. Lo que quiere pone en valor Torres es que, muchas iniciativas tienen distintos puntos de vista que pueden convivir y «hay que tenerlos presentes». «No hay que perder de vista ninguno, si un día te va bien optar por comprar algo en la máquina, «adelante»; pero no podemos perder de vista nuestro tejido comercial», sostiene.
Otras acciones
El Pla Local de Famílies contempla otras iniciativas como la de promover los espacios de lactancia en los centros cívicos de la ciudad, algo que se llevaría a cabo mediante una prueba piloto y que se pondría en marcha entre el año que viene y el que le sigue, según indica el Pla de Famílies. Dicha voluntad, que hace llamamiento a otros servicios privados que quieran sumarse, viene marcada con una prioridad baja.
Entidades que apoyan la lactancia materna, como Do de Pit –con más de 20 años asesorando en este campo y presente en la provincia de Tarragona– expresan que según tienen entendido, en la capital del Baix Camp, «no nos consta que haya salas de lactancia propiamente dichas».
Por su parte, Torres, de Mareus, tercia que aunque celebran desde el grupo de apoyo que se promueva la lactancia materna, «que también forma parte de una alimentación saludable y crea un vínculo», hay que «normalizar el mero hecho de dar el pecho, tiene que ser visible ante la sociedad». Ella, como otros grupos de apoyo también piden que se haga más pedagogía, que «se sensibilice a la ciudadanía».
«Está bien que se promuevan lugares en los que dar el pecho, pero no debería de esconderse y crear espacios de interior que promuevan desempeñar la acción puede provocar que se siga considerando, en algunos caso, un tabú y no debería de ser aí», completa Torres.
Necesidades familiares
El documento municipal también expone otra acción aplaudida por las familias consultadas, como la de incidir en el aumento de lavabos públicos, especialmente los adaptados a la medida de los más pequeños y colocando cambiadores en los servicios masculinos, algo en lo que se trabajaría entre este año y el 2025. Esta acción incorpora una prioridad de tipo bajo y se trata como las anteriores el resultado de un análisis de las necesidades familiares.
Por lo que se refiere a peticiones de las familias, a raíz de la presentación del Pla Local de Famílies, este rotativo se hizo eco entonces de algunas solicitudes de padres y madres que acuden con sus hijos al espacio de juego y experimentación en familia del Servei Orientació i Atenció a les famílies (SOAF) Mas Pintat de Reus. Entre otras, la más habitual era la necesidad de rodearse de otros padres y madres para formar «una tribu», dijeron.
«Vine a Mas Pintat buscando a madres como yo, para sentirme acompañada. Es útil porque te sientes comprendida, te orientan en muchos aspectos y ves a otras personas en tu misma situación», contaba O. A. S. (34), con un par de hijos, al Diari.
La oportunidad de formarse y de interrelacionarse, algo que promueven en el SOAF Mas Pintat, es algo que los padres de adolescentes agradecen mucho, así como la potenciación de actividades intergeneracionales entre abuelos y abuelas junto a sus nietos y nietas.
El Pla Local de Famílies se elaboró a partir de un proceso participativo en el que se implicaron hasta 420 personas y tiene como objetivo, recordó en la exposición del proyecto el concejal de Salut i Ciutadania, Òscar Subirats, hacer un «diagnóstico» y, así, observar la realidad reusense en cuanto a tipos de familia y necesidades.
Para ello, se realizaron ocho talleres participativos, de diagnosis y recogida de propuestas de acción, encuestas, una audiencia pública y reuniones con entidades y grupos políticos, entre otros colectivos.
