No había pasado ni un año desde que fue condenado por un delito de abuso sexual –pena de prisión que se dejó en suspenso a cambio de que no delinquiera de nuevo en un plazo de tres años– cuando volvió a cometer otros dos delitos en Tarragona. Ahora, la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Tarragona le ha impuesto dos años de prisión por uno de los delitos y medio año por el otro. Se ha tenido en cuenta la agravante de reincidencia y la atenuante de dilaciones indebidas. Además, durante cinco años no podrá comunicarse ni acercarse a la víctima, a la que tendrá que indemnizar con 2.000 euros. Es el acuerdo de conformidad alcanzado entre el fiscal y la defensa.
El acusado es un ciudadano español. Sobre la una y media de la tarde del 16 de noviembre de 2017 se encontraba en una parcela del barrio tarraconense de Bonavista. Se cruzó con la hermana pequeña de su novia, que tenía nueve años. Le tocó las nalgas mientras le dijo expresiones como que quería mantener relaciones sexuales con ella.
Nuevo encuentro
Unos días más tarde, el acusado se encontró de nuevo con la menor en un descampado próximo a la calle Riu Llobregat, en el barrio de Campclar. Le mostró sus genitales mientras se masturbaba en presencia de la menor, a la vez que le decía que se acercara.
El procedimiento ha estado paralizado por causas no imputables al acusado. La Sección Cuarta de la Audiencia de Tarragona había ya condenado al procesado el 30 de enero de 2017 por un delito de abuso sexual a menor de 16 años a la pena de un año de prisión, que quedó suspendida con la condición de no volver a delinquir en tres años.
