'Creo que todavía falta mucho para que la gente sepa qué es el erotismo'

En los 90 consiguió romper la imagen convencional de las stripers con sus numerosas apariciones en Crónicas Marcianas, participando en debates y actuando en directo. Ayer visitó Tarragona con motivo del primer aniversario de la Sala Premium

- ¿Qué te llevó a subirte por primera vez a la barra?

- Sinceramente, por casualidad. Sustituí a una compañera que no podía actuar y fue entonces cuando la compañía me vio y quiso ficharme.

- Registraste la marca Strip Art, ¿qué quisiste unir?

- Me siento identificada tanto con las bailarinas de striptease como con el arte del desnudo (escultura, pintura, fotografía...), que hace unos años parecían ser géneros incompatibles. Para mí no lo eran, y por eso inventé y registré un eslogan que los fusionara: Strip-Art.

- Que no es lo mismo que el striptease convencional...

- No. Al realizar un show de Strip-Art intento pensar en el público, en todo tipo de personas. Es decir, que sea apto para todos los públicos. De hecho, mis espectáculos pueden gustar más o menos, pero nunca se verán burdos o groseros.

- ¿Son este estilo de baile el que enseñas en tu academia?

- Lo que enseño en mi academia no es precisamente lo que hago en el escenario. Está todo dirigido a la mujer, a la sensualidad, autoestima y seducción, para todas las edades y tallas.

- Pueden desarrollarse personalmente. -Exacto. Al trabajar su autoestima salen reforzadas. Han conseguido aparcar sus problemas en la puerta cuando vienen.

- ¿Puede llegar a ser como una terapia emocional?

- En cierto modo, sí. Nos hemos convertido en una gran familia que nos hemos apoyado las unas a las otras. Cuando alguna alumna ha entrado con la moral baja, improvisamos un gabinete psicológico. Y ese día no se da clase hasta que la afectada no vuelve a sonreír.

- Con tu experiencia, ¿crees que cada vez somos más atrevidos en el erotismo?

- Creo que todavía falta mucho para que la gente sepa realmente qué es el erotismo y no lo confundan con otras cosas. Es lo que les pasa a los jóvenes, que son precoces en el sexo, pero no en el erotismo. Éste se alcanza con la madurez.

- ¿Tus próximos proyectos?

- Mi vida ya es un proyecto interminable (se ríe). Entre la escuela y los shows, ya tengo suficiente.