Cuenta atrás para el DO Tarragona

Sorteando por enésima vez dificultades económicas, con algo de retraso sobre sus fechas habituales y desvinculado de las fiestas de Santa Tecla, el DO Tarragona, el tercer certamen musical más veterano de España, cumple 25 años. Lo hace, pese a los agobios presupuestarios, a golpe de vigoroso eclecticismo y con buena salud artística, convertido en un escaparate cultural, un termómetro de la ‘movida’ musical en la provincia y, sobre todo, un trampolín para los grupos locales.

«La contribución del concurso es innegable. Seguir apostando por un certamen así es una muestra de la cantera musical, de la exposición de las nuevas tendencias en la provincia. Mi valoración es positiva, todo se puede mejorar, pero es de notable alto. Ha habido años en los que ha peligrado, pero nos hemos plantado aquí como un referente para las bandas locales», admite Miguel Alberto Cruz, presidente de la Associació de Músics de Tarragona (aMt), la entidad organizadora, un año más volcada en esta captación de talento con proyección por toda la demarcación.

El certamen apura sus últimos días de inscripción de grupos. El plazo para enviar las propuestas finaliza el próximo jueves día 15 a las 0.00 horas. De las bandas presentadas, un jurado elegirá a seis, que participarán en la final del 14 de noviembre, en la Capsa de Música. Con casi 6.000 euros en premios en total, el ganador, además de dinero en metálico, se llevará billete para tomar parte en diferentes actuaciones promocionales: Fira de Música al Carrera de Vila-seca, en la final del siguiente DO como banda invitada y en un acontecimiento del Consell Regulador de la Denominació d’Origen de Tarragona. Los finalistas también podrán participar en la programación estable del DO durante el próximo año.

«Este año la final no se celebrará dentro de las fiestas de Santa Tecla, sino en noviembre, para que el concurso gane perfil propio. A pesar de eso, continuará ligado a las fiestas, que sí acogerán a partir de 2016 la programación estable con los finalistas del año anterior», asegura el Ayuntamiento de Tarragona.

De Los Burton a Ivory

La historia del DO –su embrión, en los primeros años 90, fue el antiguo Canya’n’roll– está plagada de nombres emblemáticos de la escena local. Los Burton, unos clásicos del rock, ganaron el certamen en sus inicios. En los últimos años, los vencedores han explorado tendencias emergentes, como es el caso de Lecirke, Transistor Arkestra o Satèl·lit, que han publicado este año su primer disco de larga duración. Los mismos Harrison Ford Fiesta, con álbum de debut bajo el brazo, o los jovencísimos Ivory, de la Selva del Camp, ganadores el año pasado, que siguen publicando canciones y actuando, son dos ejemplos más en los que el certamen ha servido de plataforma para darse a conocer. «El DO es una oportunidad para que los grupos de toda la provincia puedan empezar a moverse y tocar. Es importante conservar algo así, más en estos momentos en los que la música vive tiempos muy bajos y en los que los grupos incluso tienen que pagar por tocar en algunas salas, sabiendo además que ahora la base de los ingresos para una banda son los directos», confirma Miguel Alberto Cruz. Curiosamente, otras propuestas de éxito y largo recorrido nacidas en Tarragona como Bongo Botrako y Febrero nunca se impusieron en el certamen.

Otros artistas finalistas en los últimos años, como Göttemberg, The Krav Maga, Olga Pes, Nacho Nando & Miguel, Oscárboles, Dear o Sifóra Kemfai Elföll, también aprovecharon la cita para exhibir sus propuestas y, a partir de ahí, relanzar trayectoria. «Es significativa la carrera de algunos grupos que han pasado por aquí y que después han logrado publicar su disco y conseguir actuaciones», remarca Miguel Alberto. Desde ahora y hasta el próximo 14 de noviembre, día de la final, el DO Tarragona, ejemplo de longevidad y lucha contra la adversidad, busca flamante ganador para ponerle el broche a sus bodas de plata.