'El libro de la vida', una golosina visual animada para celebrar el Día de los Muertos

La película cuenta las aventuras de Manolo, un torero enamorado de una bella mujer llamada María, que ha de decidir entre su familia y su mayor pasión: la música. Antes de elegir qué camino tomar, Manolo se embarcará en un increíble viaje que abarcará tres mundos fantásticos, en los que deberá encararse a sus peores pesadillas y miedos. Como telón de fondo, la película nos situará en México en el transcurso de la conocida tradición del Día de los Muertos. El filme nos anima a celebrar el pasado, sin olvidar lo que está por llegar en el futuro.

Los temas son los habituales de las películas de animación: el amor, la amistad, la familia... Pero hay que destacar dos aspectos curiosos: la desmitificación de la muerte, para que no sea algo tan trágico (algo muy típico de la cultura mexicana) y el mensaje antitaurino, ya que el protagonista es un torero incapaz de matar y cuyo sueño es ser guitarrista.

Una auténtica golosina visual y un trabajo deslumbrante que disimula su tópica historia con una atmósfera hechizante. La película mezcla con éxito y de manera muy disfrutable, lo macabro con lo festivo. Es, además, musical gloriosamente colorido, que compensa su falta de diálogos concisos con sus envolventes imágenes. Es también una alegre celebración del folklore mexicano. En definitiva, una gran película pero que no va dirigida a los más pequeños de la casa. El filme, producido por Guillermo del Toro, estuvo nominado en los Globos de Oro 2015 en la categoría de Mejor Película de Animación.