Elsa Punset reivindica un modo de vida nómada

La divulgadora ha publicado ‘Fuertes, libres y nómadas’, una guía para relacionarse con el mundo cambiante que la tecnología y el coronavirus han creado

27 septiembre 2020 17:20 | Actualizado a 27 septiembre 2020 17:25
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Ya desde el título de su nuevo libro, Elsa Punset (Londres, 1964) reivindica un modo de vida nómada. «La misma palabra me trae imágenes de cielos estrellados y horizontes lejanos», asegura la divulgadora, que publica Fuertes, libres y nómadas (Destino), una guía para relacionarse con el mundo cambiante que la tecnología y el coronavirus han creado.

«Vamos a una forma fluida de vivir, sin tribalismos ni fronteras, ni físicas ni mentales. Los nómadas del siglo XXI viajarán ligeros, mental y físicamente. No necesitarán nación o raza. El género, la edad o la etnia son conceptos del pasado», explica Punset, que pide renunciar en lo posible «al ritmo vertiginoso, a un exceso de expectativas y ambiciones y al consumismo desaforado» para aspirar a no traicionar «al niño que todos llevamos dentro».

«La convivencia intensa con los familiares, y ese tiempo perdido para pensar y sentir y agradecer la vida que nos rodea, ha sido una pequeña revelación para muchos de nosotros durante la pandemia. ¡Nos hemos dado cuenta de que no necesitamos tantas cosas como creíamos!... Hemos gastado menos y hemos empleado más tiempo y energía en las relaciones humanas», cuenta la filósofa y escritora, que cree que el virus ha servido para «reflexionar sobre el mundo que queremos legar a nuestros hijos».

En Fuertes, libres y nómadas, Punset reivindica un retorno a la naturaleza, como fuente de crecimiento, de salud y hasta de descanso. Entre los consejos para encontrar esa reconexión, propone «potenciar el movimiento natural en la vida cotidiana, cuidar de nuestros pies, respetar nuestros ritmos circadianos, plantar y sembrar o darse baños de bosque».

«La naturaleza tiene una ventaja, y es que siempre está allí, con los brazos abiertos, para acogernos. Volver a ella, reconectar con nuestra esencia vital, es justicia, salud y supervivencia», explica la escritora, optimista frente al futuro: «Estamos derribando prejuicios progresivamente. Ahora están en la picota el sexismo y el racismo, pero pronto le tocará el turno también al edadismo y al especismo. Nos vamos aligerando de prejuicios e injusticias».

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