Enamorarse de una persona virtual creada por una 'app', un riesgo para gente con autoestima baja

Plataformas como Invisible Boyfriend o Invisible Girlfriend permiten crear la pareja ideal, escoger su nombre y aspecto y crear su personalidad a partir de los gustos del usuario

19 mayo 2017 16:22 | Actualizado a 24 diciembre 2019 23:10
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Las personas con baja autoestima pueden acabar enamorándose de un novio imaginario creado a medida del usuario por una aplicación para suplir la falta de una pareja real, advierten los expertos.

Plataformas como Invisible Boyfriend o Invisible Girlfriend permiten crear la pareja ideal, escoger su nombre y aspecto y crear su personalidad a partir de los gustos del usuario.

Se puede diseñar a la pareja ideal eligiendo su edad, gustos personales, aficiones, defectos, fotografías e incluso crear una historia sobre cómo se conocieron y cómo empezó a surgir el amor.

El perfil de usuario de estas plataformas es el de alguien con una "incapacidad puntual o duradera para comenzar una relación amorosa real, que tiene miedo al fracaso y frustraciones acumuladas o baja autoestima, y que puede acabar enamorándose del personaje creado", afirma la profesora colaboradora de los estudios de psicología y ciencias de la educación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC) Mireia Cabero.

La experta considera que la confianza en uno mismo "sólo se consigue en la práctica real y no en la virtual" y por tanto estas aplicaciones "no son un buen entrenamiento para citas futuras".

"Las relaciones sentimentales virtuales crean dependencia", ha afirmado la psicóloga especialista en terapia sexual y de pareja Mati Segura, que desde el año 2002 trata las relaciones de pareja.

"Chatear nos permite sentir que tenemos amores idílicos, no nos obliga a implicarnos y nos permite contar con un espacio propio que nos produce satisfacción", ha comentado Segura, con lo que "se convierte en una válvula de escape".

Los encuentros virtuales despiertan emociones tan intensas en el usuario como si el encuentro fuese real, mantiene la experta.

Las aplicaciones que crean la media naranja imaginaria perfecta también "pueden ser una salida para la gente que sufre mucha presión social por el hecho de no tener pareja", ha explicado Cabero.

"Se trata de un autoengaño", sentencia la experta, que explica que hay que aprender a aceptar y relativizar el hecho de ser diferente del estándar social y vivirlo con naturalidad.

Algunas de estas aplicaciones se nutren de la información que el usuario da cuando acepta las cláusulas del contrato de uso de sus cuentas de Facebook, Twitter, Spotify, búsquedas en Google o incluso la geolocalización.

"Parece increíble, pero con la información personal que se mueve en internet sobre nosotros se pueden conocer muy bien nuestros gustos y carácter", afirma el profesor de Informática de la UOC Antoni Pérez.

A partir de los datos a su alcance, las aplicaciones actuarán como lo haría una pareja real, podrán recomendar libros, compartir canciones de acuerdo con los intereses de los usuarios o preguntar cómo ha ido una reunión o la cita con el médico.

Incluso se pueden enviar mensajes a la pareja virtual, que acaba formando parte de la realidad del usuario, advierten los expertos.

Para aquellas personas interesadas, las aplicaciones también ofrecen un servicio más completo que incluye recibir mensajes de carácter más íntimo.

Los beneficios emocionales de este tipo de aplicaciones "son evidentes" ha afirmado el profesor de humanidades y sociólogo de la UOC Francisco Núñez, porque generan emociones reales y satisfacción personal, y permiten "disfrutar virtualmente de lo que significa tener una relación real".

En funcionamiento desde enero de 2015, estas plataformas han conseguido medio millón de visitantes procedentes de 193 países diferentes, de los que seis de cada diez fueron mujeres, según fuentes de las propias plataformas.

Comentarios
Multimedia Diari