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Inka se estrenará como lectora de Harry Potter con El legado maldito, el último episodio de esta saga, que ayer salió a la venta en español y catalán. «He visto todas las películas, pero no me he leído ningún libro. Espero que no me decepcione», afirma la joven de 23 años mientras hace cola para comprarlo en la librería La Capona de Tarragona. A media tarde ya se habían vendido allí 65 ejemplares: 35 en la lengua de Espriu y 30 en la de Cervantes. «Teníamos encargos desde hace días», dice Josep Maria Rovira, uno sus propietarios.
Sin aglomeraciones ni codazos por ser los primeros en adquirir el libro. Sin la locura que se vivió en ciudades como Madrid o Barcelona, donde los fans se agolpaban en las librerías a medianoche –cuando salió a la venta–. En Tarragona había menos prisa. Quizá porque no se trata de un original de J.K. Rowling, sino que es el guión de una obra de teatro escrito por Jack Thorne. Está basado en la historia del mago, pero es otra cosa.
«Puede que tenga menos tirón que las novelas, pero está funcionando bien, sobre todo entre los adolescentes», apunta Paco Jiménez, empleado de la librería Adserà de Tarragona. Por la mañana flojeaba, pero a primera hora de la tarde ya había vendido veinte ejemplares –trece en español y siete en catalán–.
Hacía ocho años que no había novedades literarias de Harry Potter. Sus seguidores esperaban impacientes la nueva entrega. «En cuanto llegue a casa voy a empezar a leerlo. Soy fan desde niña, he leído todos los libros», dice la veinteañera Maria Rovira.
Otra joven hojea un ejemplar y lo devuelve al estante. «Ya me lo he leído en inglés», comenta. Es de las que no pudo aguantarse y lo compró en el idioma de Shakespeare cuando salió a la venta el pasado 30 de julio. «La generación que ha crecido con Harry Potter sabe inglés y no ha esperado a que salga en catalán y castellano», señala Ramon Arrugat, propietario de la librería La Rambla de Tarragona, que recuerda que Harry Potter comenzó siendo un cuento para niños de ocho o diez años y ahora está enfocado también para adultos.
«La saga para mí ya ha terminado, pero me lo voy a leer porque soy un gran seguidor», cuenta Carlos, de 21 años, que ha crecido con sus historias.
En Abacus, niños, jóvenes y menos jóvenes pasaron por el pequeño photocall montado para la ocasión. El establecimiento está decorado con referencias al mundo creado por J.K. Rowling. Una lechuza vigila desde lo alto y asoman murciélagos y sombreros de bruja. Harry Potter y el legado maldito es el protagonista del día.
Ahí va la sinopsis: el joven mago se ha convertido en un atareado empleado del Ministerio de Magia, un hombre casado y padre de tres hijos. Cuando el destino conecte el pasado con el presente, afrontará con su vástago menor, Albus Severus, una verdad muy incómoda: a veces, la oscuridad surge de los lugares más insospechados. Próximamente en cines.
