‘La prensa y los libros de papel aún tienen crédito’

Ramon Pedrós es natural de Lleida. Periodista por casualidad, fue director del Diari de Tarragona (2006-2008). Antes, profesor en la Complutense de Madrid, corresponsal en Moscú, Washington y Bruselas, delegado de la agencia EFE en Catalunya, director de Metro y diez años jefe de prensa de Jordi Pujol en Presidencia de la Generalitat. 

- Un periodista de larga trayectoria que abre una editorial en Lleida y Cambrils. ¿Por qué este cambio de registro?
-Mi última etapa como periodista en Lleida fue muy dura. Eso sí, superamos un concurso de acreedores y logramos salvar el diario La Mañana y un buen puñado de puestos de trabajo. Acabado aquello, decidimos con mi mujer, que también había vivido en Tarragona y Cambrils, venirnos a la Costa Daurada. Y hemos puesto en marcha la editorial Lakibuks con ganas de dar salida a muchas voces que no llegan a las editoriales convencionales, y a mucha gente que quiere dejar escrita su biografía a los suyos.

- ¿Qué significa Lakibuks? ¿Quién forma parte de este proyecto empresarial?
-Podríamos traducirlo como «libros con suerte», escrito tal como suena. La impulsamos un grupo de amigos procedentes del periodismo, la literatura, el diseño y la industria editorial. Internet facilita que podamos tener en Lleida el diseño, la maquetación y corrección, trabajando desde casa; y en Cambrils, la dirección, administración y márketing. Es la fórmula ideal para evitar estructuras pesadas y alquileres inútiles, y que te permite ofrecer mejores condiciones que la competencia.

- ¿Cuáles son las metas deesta editorial a corto y medio plazo?
-Consolidarnos como alternativa editorial independiente, sin prisas, pero sin olvidar que el mundo avanza hoy muy de prisa y con alianzas.

La editorial Lakibuks quiere dar salida a muchas voces

- Usted tiene una larga trayectoria por el mundo y al lado de la persona más señalada de Catalunya en los últimos años, Jordi Pujol. ¿Se animará a escribir sus memorias? ¿Con su etapa en la Generalitat quizá tenga una buena promoción?
-Tal vez me lo piense, pero ahora no es mi prioridad. Ya escribí varios libros sobre los viajes y el perfil humano de Jordi Pujol, a quien siempre había admirado como defensor de Catalunya, como la mayoría de catalanes, pero el peso de la gran decepción sufrida con sus confesiones aplastó mi entusiasmo.

- La máquina del tiempo. Diario de mi vida entre dosmundos, de Nieves Álvarez, es el primer libro de Lakibuks. ¿Tienen más proyectos en el horno?
-Estamos muy contentos de cómo está funcionando este primer libro, que es el diario de una mujer humilde, que se crió en un campo de chabolas de Gijón, pero que de forma increíble fue haciendo un diario personal durante años, movida por una sorprendente fijación literaria. Y eso le dio fuerza para superar todas las dificultades, incluido su matrimonio con un alcohólico.

Nieves Álvarez Gallo es todo un ejemplo de lo que pretendemos recuperar y dar a conocer. Pero en otra línea está el próximo libro, que saldrá en setiembre: El Corpus de Sang, una novela histórica sobre el marco general de la Guerra dels Segadors, que arranca con el trágico sitio al que fue sometida Cambrils, escrita por Araceli González Marsó, de Torelló (Osona). 

-Reconoce que la editorial pretende apoyar a aquellos autores que se encuentran las puertas cerradas de las grandes empresas. ¿Esto no supone un riesgo a la calidad literaria que apadrina o de una falta de rentabilidad empresarial?
-No, como lo demuestran estos dos libros. Además, Lakibuks funciona tanto como editorial convencional, con sus colecciones literarias, como con el sistema de autopublicaciones o ediciones de autor, que permite ajustarse al cliente. Le diré, como ejemplo, que un empresario nos ha encargado la publicación de sus memorias, pero sólo quiere editar tres ejemplares, que son para sus tres hijos. En los primeros casos, prima la calidad de la obra, y en éste, la rentabilidad de la empresa que hemos creado.

Lleida siente una atracción especial con la Costa Daurada  

- Viendo el mundo digital que está ganando terreno al papel, usted apuesta por el formato tradicional. ¿Tiene futuro el papel, ya sea en los libros que publican o en la prensa donde ha trabajado tantos años? 
-Sin duda, en ambos medios, aunque el crédito no será eterno y nada volverá a ser como antes. Hizo más daño al papel la crisis económica que la revolución digital, que convivirá con el papel, como demuestran las estadísticas, una vez redimensionados los medios y las estructuras empresariales. 

-Vive en Cambrils. ¿Qué tiene la Costa Daurada para los ilerdenses que terminan echando raíces?
-Lleida siente una atracción directa y una conexión especial con la Costa Daurada, que antes atraía segundas residencias, por el calor sofocante de Ponent, pero ahora lo hace no sólo en verano, sino todo el año. La gente de Lleida ama su tierra, y venera hasta la boira en invierno, pero siente una envidia sana por el clima, el mar y la calidad turística de la Costa.