'Mortdecai', humor del absurdo con poca gracia y el robo de un Goya

Johnny Depp se mete en la piel de este lord inglés dispuesto a hacerse con una obra del pintor relacionada con los nazis. Divertida por momentos, sosa en otros

19 mayo 2017 23:05 | Actualizado a 22 mayo 2017 21:20
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

Temas:

Como guionista, David Koepp ha sido prolífico, cosechando grandes éxitos de taquilla en pluma han salido ‘taquillazos’ como ‘La muerte os sienta tan bien’, ‘Parque Jurásico’, ‘Atrapado por su pasado’, ‘The paper’, ‘The shadow’, ‘Mission: Impossible’, ‘The Trigger Effect’ , ‘Men in black’, ‘Snake eyes’, ‘El último escalón’, ‘Spider-man’, ‘La habitación del pánico’, ‘La ventana secreta’, ‘La guerra de los mundos ‘ ( en la versión de Spielberg), ‘Zathura’ o ‘Indiana Jones y las calaveras de cristal’. No está nada mal. Es un referente a la hora de idear los diálogos y las tramas de películas de acción, misterio o comedias.

Sin embargo, no ha tenido el mismo acierto a la hora de dirigir algunos de sus proyectos. Ni ‘Sin frenos’, ‘The Trigger Effect’ o ‘La ventana secreta’ supusieron el espaldarazo que esperaba sentado en la silla de dirección. Algo mejor le fue con ‘El último escalón’.

Ahora tampoco ha cosechado un éxito sonado en ‘Mortdecai’, un filme para algunos divertido, irreverente, extravagante... en definitiva, genial. Pero otra parte de la crítica, la película es, resumiendo, un auténtico plomo, sin gracia alguna y una especie de ‘El gran hotel Budapest’ en versión ‘light’.

Mortdecai no es Sparrow

‘Mortdecai’ es un puro ejercicio del absurdo. Un humor surrealista llevado hasta la astracanada. Pero Johnny Depp logra brillar brilla en su personaje, al igual que lo hace cuando interpreta a Jack Sparrow, creando (por cierto) escuela. El alter ego del celebérrimo pirata es el protagonista del filme, basado en la trilogía del mismo título de Kyrill Bonfiglioli. Depp, que lleva una ristra de títulos sin acertar en la diana como en el caso de ‘Trascendence’, ‘El llanero solitario’ o ‘Sombras tenebrosas’, vuelve a hacer del histrionismo su única capacidad para reinventarse.

Lamentablemente, ‘Mortdecai’ , pese a contar con actores de primera fila y escenarios cosmopolitas, es solo una previsible y fallida comedia sin pretensiones, que alterna momentos divertidos con lapsus de aburrimiento mortal, y en ocasiones se sumerge en el ridículo.

Ambientada en el género de los robos y la comedia (bien haría Koepp en inspirarse viendo ‘Cómo robar un millón del maestro William Wyler), ‘Mortdecai’ llega a recordar a veces a ‘Torrente’ por su humor grueso o a ‘Austin Powers’.

Lord Mortdecai (Johnny Depp, también productor, en un guión escrito para su lucimiento personal) es un snob inglés al que, por este orden, le gusta beber, su bigote, su mujer y su mayordomo, a la vez guardaespaldas, asesor, compañero de aventuras y sparring, interpretado por Paul Bettany. Es también un excéntrico marchante de arte que recorre el mundo en busca de una codiciada pintura que podría contener el código de una olvidada cuenta bancaria de los nazis.

Comentarios
Multimedia Diari