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La Asociación El Defensor del Paciente ha presentado una denuncia ante el Tribunal Supremo (TS) contra el Gobierno, que tuvo el «mando único», y las comunidades de Madrid, Catalunya y Castilla y León por las órdenes dadas para que los ancianos no tuvieran atención hospitalaria por motivo del coronavirus,
La denuncia alega el presunto delito relativo al ejercicio de los derechos fundamentales y libertades públicas, en concurso con delito de homicidio por imprudencia y presunto delito de omisión del deber de socorro.
Y se dirigen contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Derechos Sociales, Pablo Iglesias; y el ministro de Sanidad, Salvador Illa.
También contra la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; su consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, y el director de Coordinación Socio-Sanitaria, Carlos Mur de Víu. Asimismo, la denuncia implica al presidente de la Generalitat catalana, Quim Torra, y a su consellera de Salut, Alba Verges i Bosch; así como al presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y a sus consejeras de Sanidad y Familia, Verónica Casado e Isabel Blanco, respectivamente.
Encontronazo en el Parlament
En el Parlament de Catalunya, siguió ayer el pleno monográfico sobre las residencias. El president de la Generalitat, Quim Torra, y el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, chocaron a propósito de la gestión de las residencias, tanto en Catalunya como en el resto del Estado, durante la actual pandemia de coronavirus.
En una pregunta a Torra, Iceta aseguró que no confían en el Govern porque «intenta derivar las responsabilidades a otros», y le afeó que a día 7 de abril el ejecutivo catalán no tuviera datos de dos de cada diez residencias: «¿Cómo confiamos en un gobierno que no sabe lo que pasa en las residencias? La única manera de transmitir confianza es con transparencia y eficacia».
A lo que Torra le respondió que «no tenemos ni idea de lo que ha pasado en las residencias españolas», ya que el Gobierno ha sido «incapaz» de dar los datos de muertos en estos centros.
«Algún día saldrá: en España hay el doble de muertos por Covid, porque todavía no han contado los muertos en residencias. Este dato de las residencias no me lo saque a mí», aseveró el presidente de la Generalitat.
En alusión al alto número de víctimas, la Conferencia Episcopal pidió ayer perdón por la elevada mortalidad acontecida en las residencias a causa del coronavirus. El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello, entonó el ‘mea culpa’, algo que a su juicio debería hacer también la sociedad española. El obispo destacó que las residencias no son centros sanitarios, sino «hogares», y denunció que en algunos casos ha prevalecido la edad de nacimiento que figura en el DNI para negar asistencia a los ancianos. Con todo, admitió que el sistema sufrió un desbordamiento y alegó que las decisiones no deben ceñirse a criterios exclusivamente científicos y médicos, sino también atender a la ética.
