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Uno de los supuestos autores de los tiroteos ayer en un registro antiterrorista relacionado con los atentados del 13-N en París en el distrito bruselense de Forest murió y cuatro policías resultaron heridos, informaron la policía y la Fiscalía federal de Bélgica.
El operativo antiterrorista comenzó a primera hora de la tarde con dos tiroteos en ese barrio de la capital y al que le siguieron posteriormente nuevos disparos en la zona, que ya había sido totalmente acordonada y un suceso en el que resultaron heridos de diversa consideración cuatro policías, según la Fiscalía federal.
«Los agentes han llamado a la puerta del apartamento, se han disparado varios tiros desde el interior en dirección hacia ellos. Varios policías resultaron ligeramente heridos», dijo el portavoz de la Fiscalía federal, Eric Van Der Sypt.
La operación continúa abierta porque, más allá del fallecido, varias personas -la mayoría de los medios hablaban de dos- se habrían dado a la fuga tras los tiroteos.
Hay informaciones contradictorias en los medios sobre el estado de salud de los heridos.
Aunque en un primer momento se hablaba solo de heridos leves, más tarde trascendió que uno de los policías podría estar grave.
Las autoridades, que en un principio dijeron que uno de los supuestos autores de los disparos habría sido «neutralizado», confirmaron después que éste había muerto, y que la operación se había dado por concluida.
El Gobierno belga está pendiente de los acontecimientos, y podría convocar un Consejo Nacional de Seguridad.
Según informó la policía francesa, en la operación no se buscaba a Salah Abdeslam, en busca y captura internacional por su supuesta participación en los atentados de París.
Estos sucesos obligaron a las autoridades belgas a acordonar todo el barrio, así como a cerrar la circulación de dos líneas de tranvía afectadas y a un importante despliegue policial.
El ministro francés del Interior, Bernard Cazeneuve, indicó que la operación llevada a cabo era una operación conjunta en la que participaban las policías francesa y belga.
«Un equipo de policías belgas y franceses han intervenido y han sido objeto de disparos procedentes de armas pesadas», dijo el ministro en una comparecencia ante los medios de comunicación en Costa de Marfil, país que visita.
