Historia de una amistad: ‘la cosa che fai tu, lo faccio anch’io’

Lenù y Lila. ‘La amiga estupenda’ es el primer libro de la tetralogía ‘Dos amigas’ con la que la enigmática Elena Ferrante ha fascinado a medio planeta

13 mayo 2019 20:09 | Actualizado a 14 mayo 2019 09:36
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Una llamada: Rino pregunta por su madre, desaparecida hace más de dos semanas sin dejar rastro. Elena no sabe dónde está, pero no se preocupa en absoluto porque comprende que su amiga ha desaparecido voluntariamente.

Como hace más de 30 años que le adiverte que quiere hacer: ‘volatilizarse; quería dispersar hasta la última de sus células, que de ella no encontraran nada.’ Pero Elena no puede evitar enfadarse, una vez más, con Raffaella Cerullo, su Lila, ya que, conociéndola bien, sabe que Lila no sólo pretendía desaparecer a sus 66 años, ‘sino borrar además toda la vida que había dejado a su espalda’. Y por ello y para ver quién realmente se salía con la suya, Elena enciende el ordenador para escribir la historia de su amistad. La de Lenù y Lila. La de Lila y su amiga estupenda.

Así empieza el relato del primero de los volúmenes de la saga Dos amigas, compuesto por cuatro libros (La amiga estupenda, Un mal nombre, Las deudas del cuerpo y La niña perdida) que han atrapado millones de lectores en más de 40 países y que recientemente HBO ha presentado en la pequeña pantalla. Y parece ser que en formato serie también triunfa, ya que hace poco se ha confirmado que habrá segunda temporada. 

Bajo la voz de Elena nos trasladamos al Nápoles de posguerra, donde nace el origen de la amistad de nuestra narradora, Elena Greco (Lenù) y Rafaella Cerullo (Lila). Compañeras de colegio, no podían ser más diferentes. Lenù obediente, dulce, tranquila e insegura; Lila, nerviosa, inquieta, retadora y echada para adelante.

Pocas veces jugaban, pero hubo un hecho que las unió para siempre: cuando ambas fueron a buscar sus muñecas a la casa de don Achille, un hombre al que todos los niños temían, porque (siempre según Lila) él las tenía escondidas. Cogidas de la mano con fuerza y con una Lila firme enfrentándose a un adulto, consiguieron que don Achille les diese dinero para comprarse unas nuevas muñecas. Esto impactó a Lenù: ‘le che fai tu, lo faccio anch’io’ (lo que tú hagas, lo hago yo también’).

Elena empezó a admirar e idolatrar a Lila, una niña siempre algo turbia, que también parecía adorar a Elena y se volvieron prácticamente inseparables. Desde la infancia hasta llegar a la adolescencia, ambas comparten aventuras, juegos, desencuentros, amistades, descubrimientos, dudas, disputas familiares para poder seguir estudiando y, ante todo, un libro que lo fue todo para las dos: Mujercitas.
Un espejo donde mirarse... y la vez competir para superarse.

Una amistad que se forjó en un barrio lleno de violencia, caos y crispación, donde para ambas, la educación se convirtió en una vía de escape, una aspiración para tener una vida mejor. Una relación donde la confianza y comprensión también estaba llena de celos y envidias ahogados en el silencio y las ansias por ser mejor. 

De Elena Ferrante, la autora del libro, poco se conoce, ni tan si quiera se sabe si su nombre es verdadero. Su personalidad real permanece oculta, pero no su escritura, ágil y agradable con la que fácilmente te introduce en la historia. En pocos capítulos te sientes un intruso invisible en esa historia tan íntima, que no deja de estar llena de los ecos de la fuerza y la verborrea del sur de Italia.

 

La amiga estupenda

  • Autor:  Elena Ferrante
  • Editorial:  Lumen
  • Páginas:  386

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