K-9 de Creixell o la lucha desigual contra el lodo tóxico de la catástrofe de Brasil

La expedición tarraconense intenta señalizar a las víctimas de la ruptura de la presa minera entre un lodazal que hunde perros y personas hasta medio metro.

01 febrero 2019 13:51 | Actualizado a 05 febrero 2019 13:55
Se lee en minutos
Participa:
Para guardar el artículo tienes que navegar logueado/a. Puedes iniciar sesión en este enlace.
Comparte en:

La recuperación de cadáveres bajo metros y metros de lodo acumulados a raíz der la ruptura del dique den una empresa minera (Vale), en la mina Córrego do Feijao, situada en el estado de Minais Gerais, en el sudeste de Brasil, sigue activa a pesar de las enormes dificultades. Hoy viernes es el octavo día tras la avalancha de barro tóxico.

Entre los numerosos voluntarios y profesionales que buscan ahora ya cadáveres bajo el barro está la ONG K-9 de Creixell, que cuenta con delegación en Brasil y Chile para poder llegar cuanto antes a las tragedias naturales que requieran de su experiencia.

Su presidente, Pere Frutos, esta vez ha podido viajar y coordinar un equipo de siete personas y sus respectivos perros. Ellos son los que olfatean a las víctimas y señalan donde puenden estar sepultadas.

El barro no es una montaña de cascotes. Su composición más densa e impermeable hace difícil olfatear y garantizar la localización de las personas. Además, su textura, blanda, termina dejando clavados a perros y voluntarios hasta medio metro.

Frutos ha explicado para el Diari, las enormes dificultades que se encuentran en esta zona selvática de Brasil. A pesar de los contratiempos y el cansancio acumulado de animales y personas, su granito de arena sigue siendo indispensable.

Hasta ayer jueves el balance de la tragedia ascendía a 110 muertos y otros 238 desaparecidos.

Las búsquedas en la región de Brumadinho, una localidad de 39.000 habitantes a 60 kilómetros de Belo Horizonte (la capital de Minas Gerais), todavía movilizan a centenares de bomberos, policías y voluntarios cuando pasaron ya varios días de la tragedia.

El dique de residuos cedió el 25 de enero. La marea de lodo arrasó parte del municipio de Brumadinho y sepultó instalaciones de la empresa.

Comentarios
Multimedia Diari