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El acto de entrega de los segundos Premis a la Internacionalizació, de la Cambra de Comerç Reus, fue un espacio para reivindicar los valores de la marca Reus. Una ciudad que «en las últimas horas ha pasado por una vorágine de proporciones desmesuradas». Así lo definió el presidente del ente cameral, Isaac Sanromà, que ayer ejerció de anfitrión en la entrega de premios en la que se puso en valor la actividad exportadora de las empresas reusenses.
Sanromà destacó el carácter «trabajador» y el «esfuerzo» de un Reus que «se ha ganado a pulso su posicionamiento y en que nadie nos ha regalado nada». «Estamos aquí gracias al esfuerzo y trabajo, con rigor y responsabilidad», añadió el presidente de la Cambra.
No hizo una referencia directa a los hechos el alcalde de Reus, Carles Pellicer, quien llegó prácticamente en la parte final del acto, dispuesto a ejercer la clausura. Sin embargo, del discurso del máximo responsable municipal pudo hacerse más de una doble lectura. Especialmente cuando, hablando sobre la situación económica, aseguró que «las cosas siempre tienen tendencia a solucionarse».
Pellicer, que animó a las empresas a seguir abriéndose camino hacia nuevos mercados, concluía su intervención asegurando que «cada día debemos tener una actitud positiva».
En total se entregaron hasta cuarenta y dos distinciones a empresas representativas de los 99 municipios de las cinco comarcas que conforman el ámbito de actuación de la Cambra de Comerç de Reus. El sector agroalimentario fue uno de los que tuvo más peso, aunque también se distinguió la actividad exportadora de empresas químicas o del turístico. Precisamente la encargada de hablar en nombre de los premiados fue la presidenta de la Associació Hotelera de Salou- Cambrils- La Pineda, Maria Eugènia Arbó, quien recordó que la trayectoria emprendedora de este territorio «suma molts anys plens d’afanys, tal y como dice el himno del Barça».
En nombre del Govern de la Generalitat estuvo presente el secretario general del Departament d’Empresa i Ocupació, Xavier Gibert, quien alentó a los asistentes a apostar por «un modelo productivo sostenible en el tiempo». Y este pasa por «formación, innovación, calidad en el producto y, en definitiva, la búsqueda de una economía más abierta, basada en aspectos de valor añadido». Gibert puso en valor que el comercio exterior representa el 67% de las ventas.
